Esclavos que alcanzan la libertad y dedican su vida a intentar liberar a sus semejantes. En nuestra isla hubo un personaje así: el guanche Don Erique de Anaga.
En el pasado isleño, el suministro de fruta, carne, o verduras que llegaba a los mercados de las ciudades lo hacía sobre las cabezas de las mujeres del campo tinerfeño.
Las actas del antiguo Ayuntamiento de La Laguna, único de la isla, son una mina: si se cava en ellos, se encuentran historias, grandes y pequeñas, que nos cuentan quienes fuimos...
Las visitas de corsarios a nuestra isla eran frecuentes en el siglo XVI. Y el Gobierno de la isla no siempre tenía medios para hacer frente al enemigo.
La supervivencia de los niños que nacen en nuestra isla, hoy en día, se da por sentada. Pero un vistazo a la historia nos demuestra que se trata de una absoluta novedad histórica.
Los dragos, símbolos vegetales de Tenerife, dominaron una vez buena parte de la isla. Hoy, aunque están presentes en parques y jardines,apenas quedan dragos silvestres
El comienzo del siglo XVIII se presentó movidito en la isla de Tenerife. Tres erupciones volcánicas consecutivas vinieron a sacudir la tranquilidad isleña.