Robe ha vuelto a brillar esta noche como sólo él sabe hacerlo sobre el escenario del pabellón Santiago Martín "la Hamburguesa", que se había engalanado para recibir al de Plasencia. El fundador de Extremoduro pondrá la guinda a su gira "Ahora es cuando" --heredera de la gira "Ahora es el momento"-- el próximo día 19 en el Wizink Center de Madrid, acabando con seis meses de conciertos por toda España.
Unas 5.000 personas coparon el viernes el Gran Canaria Arena, 4.000 lo han hecho hoy en La Laguna, todo para ver a todo un referente del rock en español, en solitario desde que Extremoduro se disolviese en 2019.
Entre la nostalgia y el presente
Aunque el pase por los escenarios de Robe desde junio ha sido como artista en solitario, las gradas del Santiago Martín se han llenado de nostálgicos de Extremoduro que no pudieron disfrutar de una gira de despedida porque la pandemia obligó a aplazarla y la incertidumbre sanitaria se encargó de darle la puntilla final, cancelando Robe el último adiós de la banda.
Pero el placentino no es de mirar al pasado. De hecho, "Ahora es el momento", gira previa a "Ahora es cuando", se llamó así porque el compositor quería seguir adelante sin Extremoduro, con el grupo que le acompaña en la gira. "Para mí, Extremoduro forma parte del pasado y yo quiero vivir en el presente”, aseguró Robe este agosto.
Toda una vida de rock
La gira ha recogido canciones de toda una vida, haciendo sonar en la Hamburguesa los temas de "Mayéutica", el último álbum en solitario de Robe, pero también otros clásicos del artista y, por supuesto, de Extremoduro, cerrando un concierto apoteósico con clásicos como Jesucristo García, Puta y Ama, ama, ama y ensancha el alma.
Todo con el sello personal de un artista que rehuye de lo esperpéntico y que deja que sean sus canciones, con pinceladas de susurros y violines y un inconfundible uso de ritmos ternarios, las que hagan saltar, gritar y cantar a pleno pulmón a la legión de fanes que le ha seguido por las 40 citas que ha dado hasta esta noche durante la gira.
