El CB Canarias se luce en su estreno liguero ante Baxi Manresa en el Nou Congost

Victoria canarista por 70-89 en un gran partido del CB Canarias en el que Cook, Diagne, Cruz y Fernández se estrenaron en competición oficial

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Fitipaldo ejecuta un pase ante Dani Pérez en la victoria del CB Canarias por 70-89 en el Nou Congost./ EFE
Fitipaldo ejecuta un pase ante Dani Pérez en la victoria del CB Canarias por 70-89 en el Nou Congost./ EFE

Arrancó la temporada 2022-2023 para el CB Canarias con su visita al Nou Congost para medirse a Baxi Manresa en la reedición liguera de la final de la Basketball Champions League. Los tinerfeños se impusieron por 70-89 (15-22, 14-21, 21-22, 20-24) en un partido que dominaron de principio a fin, siempre por delante en el marcador. Después de una primera mitad en la que se distanciaron a base de triples, los de Vidorreta firmaron un estreno sobresaliente aprovechándose de las numerosas pérdidas del conjunto catalán, que fue superado prácticamente en todas las facetas del juego.

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Jaime Fernández, al igual que Cook, Cruz y Diagne se estrenaron en partido oficial./ EFE

Triples para abrir el marcador

El conjunto aurinegro empezó con tres triples consecutivos, uno de Doornekamp y dos de Elgin Cook. La réplica llegó por mediación de Marcus Lee, que machacó el aro para despertar a su equipo y a la afición, así como un triple de Brancou Badio. Pero Doornekamp, de nuevo desde el perímetro, amplió la brecha y Salin se estrenó también con un triple. Los de Pedro Martínez intentaban aguantar el arreón aurinegro pero los fallos en tiros lejanos condenaron a Manresa a ir por detrás en el marcador desde el inicio. De tres en tres el Canarias sumó sus primeros 15 puntos hasta que Fran Guerra, en el quinteto titular por ausencia de Shermadini, anotó los primeros puntos en la pintura, además del tiro adicional. Al término del primer cuarto, ventaja de 15-22 para los de Vidorreta.

En el segundo cuarto los locales salieron mejor con Harding destacando con un triple al que Jaime Fernández replicó con una bandeja en un jugada individual. Durante varios minutos se instaló la sequía anotadora hasta que Sastre leyó el movimiento de Iván Cruz en la pintura y le asisitó con un pase picado para que anotara bajo el aro. Badio salió al rescate de los locales anotando un desde el perímetro pero Salin y Fitipaldo le dieron la réplica por partida doble. Con la velocidad de circulación de Marcelinho, Jaime Fernández y Fitipaldo, el Canarias se convirtió en un vendaval frente a un Manresa impreciso en los pases, que cometió demasiadas pérdidas. En el marcador se reflejaba la superioridad del Canarias, que también sumó por medio de Diagne con un semigancho en la pintura. Al descanso, mandaban el conjunto lagunero por 29-43.

Brecha insalvable

La racha canarista continuó en el tercer cuarto con dos puntos de Cook en una combinación con Doornekamp y dos triples de Fitipaldo. Marcus Lee se mantuvo incisivo, buscando reanimar a su equipo con los seis primeros puntos del conjunto catalán tras la reanudación. El juego interior canarista empezaba a concretarse a medida que Marcelinho y Fitipaldo inventaban asistencias pero Harding y Bortolani se resistían a ceder y, con dos triples, redujeron la brecha a 14 puntos. Acto seguido, cinco puntos seguidos de Abromaitis volvieron a ampliar la distancia y Pedro Martínez solicitó un tiempo muerto para intentar reconducir la situación. A pesar de que Manresa mejoró en este tercer cuarto, la renta del Canarias seguía siendo holgada, con un 50-65 a falta de los últimos diez minutos.

Al incio del último acto, anotó desde el perímetro, igualando a Fitipaldo con tres triples en el encuentro. Después de un partido desacertado de cara al aro, Marcelinho se desquitó en el último cuarto anotando ocho puntos. Los puntos de Vaulet en la pintura y un alley oop anotado por Marcus Lee en el tramo final fueron insuficientes para desafiar la ventaja de los aurinegros, que supieron gestionar su renta mientras el cronómetor corría. Finalmente, la victoria de Canarias se concretó con un 70-89 después de un partido plácido en el que siempre fueron por delante en el marcador y mantuvieron una ventaja cómoda.