Iberostar Tenerife ha caído en el derbi canario ante el Herbalife Gran Canaria. Los aurinegros empezaron muy bien el partido, pero un mal segundo cuarto, con parcial de 0-17, condenó a los de Vidorreta a ir siempre a remolque. Los grancanarios supieron jugar con el marcador a favor y acabaron llevándose el triunfo en el Santiago Martín.
Iberostar Tenerife no pudo llevarse el derbi | @Anarhefoto
Como todo derbi que se precie, el choque arrancó con tensión e intensidad en la pista. Vázquez anotó las primeras canastas aurinegras y Báez lideraba los ataques amarillos. El intercambio de canastas era una constante en los primeros minutos del choque. Doornekamp anotó el primer triple del partido a 5:01 del final del primer cuarto para poner 11-8 a los locales. Fran Vázquez estaba enchufadísimo y con dos grandes mates llevó a los suyos hasta el 17-13 en el marcador. Bogris apareció en la pintura y anotó los dos últimos de un primer cuarto que terminó con el 21-17 en el marcador.
White estiró las diferencias con un triple en el inicio del segundo cuarto. El intercambio de canastas era constante con los dos equipos muy acertados. Los aurinegros apretaron en defensa y los amarillos sufrían para anotar. Corriendo en la pista y pasándose bien el balón, los de Vidorreta se fueron hasta el 30-23 a menos de 5 minutos para el descanso. Los grancanarios reaccionaron y su acierto exterior y desde el tiro libre les puso por delante en el marcador a 2:10 para el descanso. Los de Casimiro estiraron el parcial hasta el 0-17 y colocaron el 30-40 en el marcador con un minuto por jugar. Doornekamp rompió el parcial y acercó a los suyos hasta el 33-40 con el que se llegó al descanso.
Tras el paso por vestuarios el ritmo de anotación bajó y las protestas hacia los árbitros por parte del público aumentaban debido a varias decisiones controvertidas. Costaba anotar, pero Abromaitis encontró el aro tanto desde el tiro libre como desde la pintura y colocó el 39-45 a 5 minutos del final del tercer cuarto. Los amarillos anotaban a trancas y barrancas y volvieron a la diferencia de 10 puntos obligando a parar el partido a Vidorreta con un tiempo muerto. Los de Vidorreta querían acercarse en el marcador, pero los visitantes dominaban el partido y jugaban a su ritmo y llegaron al final de tercer cuarto con el 44-55 a su favor.
El Iberostar Tenerife era un quiero y no puedo intentando reducir las diferencias ante un equipo amarillo muy cómodo en la pista y mucho más acertado. Los aurinegros se colocaron a 9 puntos a 3:11 para el final y el público empujaba soñando con la remontada. Los de Vidorreta llegaron a ponerse a 6 puntos, pero los visitantes terminaron llevándose el partido por 60-70.