El Iberostar Tenerife ya es líder de grupo. Con una facilidad pasmosa el equipo lagunero venció este miércoles a un endeble Capo d'Orlando (88-47), en el Santiago Martín.
El conjunto de Markovic encarriló muy pronto el triunfo, y no dio opción al equipo italiano a una posible remontada. Una victoria coral, con Abromaitis, Tobey y Niang, entre los actores destacados.
San Miguel lanza a canasta ante la oposición de un rival | @jacfotografoLOS AURINEGROS, SIN UN ÁPICE DE COMPASIÓN
Arrancó muy errático el equipo de Markovic, tanto en el tiro exterior como en la pintura, donde Tobey no lograba sacar tajada de su destreza en el rebote. Un triple de Abromaitis tras las intentonas de San Miguel y Richotti daban un impulso al cuadro aurinegro, herido en su orgullo por la derrota en Andorra.
Con el paso de los minutos, y aún con guarismos relativamente bajos, el equipo tinerfeño se hallaba estar mejor colocado en el parqué que los italianos, blandos en defensa e inocentes en ataque, hasta que se abrió la veda con dos triples consecutivos de Beirán. Un acicate para el conjunto lagunero.
10' |26-12| El @CB1939Canarias vence a un endeble @OrlandinaBasket en los primeros 10' de partido #BasketballCL pic.twitter.com/gmWAwlxB8H
— ELDORSAL (@ELDORSAL) 1 de noviembre de 2017
Con una importante ventaja arrancaba el segundo cuarto y un Iberostar Tenerife cada vez más fortalecido en cada una de sus facetas. Orlandina Basket, sin un patrón definido, se limitaba a intentar aprovechar el talento de Edwards, insuficiente para doblegar el empuje y la determinación de los de Markovic, en especial por parte de Petit Niang, Abromaitis, y White, el escudero. El marcador al descanso era de 43-22, con Beirán (8 puntos), Niang (6 rebotes) y Bassas (4 puntos) liderando las estadísticas.
UNA PLÁCIDA SEGUNDA PARTEUna vez reanudado el choque, todo fue un coser y cantar para los aurinegros. Markovic les prohibió tajantemente bajar el pistón, hecho que fue casi inevitable durante algunos tramos de la segunda mitad.
El preparador canarista dio entrada a los menos habituales, Vrabac, Allen y compañía, y Orlandina Basket que no terminaba de dar su brazo a torcer, pero con escasa fe en sus posibilidades. Por ello, ambos equipos encararon el último cuarto con el partido sentenciado (66-38), adoptando un cariz de amistoso de pretemporada.
A pesar de que el envite ya no tenía historia, lejos de reducir marcha, el Iberostar Tenerife quiso hacer sangre, y cerró su gran actuación con una exhibición desde la línea de tres y en la pintura con un inspirado Tobey (13 puntos), junto a unos motivados Vrabac y White, entre otros, que se sumaron al festival desde la línea de 6,75 metros.
Sonó la bocina, el cuadro italiano vio la luz y estalló de alegría el Santiago Martín, que celebra el liderato de un equipo que sigue hambriento de triunfos y títulos. El próximo miércoles, visita al PAOK griego.