Iberostar Tenerife arrolla al Herbalife Gran Canaria en el derbi y se acerca a la Copa

Iberostar Tenerife se ha llevado el derbi canario de la Liga Endesa por 92-71 al imponerse de forma clara y justa al conjunto grancanario. Davin White y Javier Beirán lideraron a un conjunto aurinegro muy superior desde el salto inicial.

El partido se inició con dominio de las defensas sobre los ataques y dos minutos sin anotar hasta que Báez estreno el marcador convirtiendo dos tiros libres seguidos. Davin White y Tim Abromaitis lideraban los ataques aurinegros mientras que en los amarillos Erikson y Báez eran los únicos que anotaban. Los triples de White y Beirán pusieron el 16-7 en el marcador  y obligaron a Luis Casimiro a parar el partido con un tiempo muerto. Beirán con tres triples y una bandeja tiraba del carro y puso a los aurinegros con ventaja de 26-18 al final del primer cuarto.

En el inicio del segundo cuarto no bajó el pistón el equipo de Katsikaris, que con un enrachado Javier Beirán estiró las diferencias hasta el 31-18. Los grancanarios querían acercarse en el marcador y gracias a Rabaseda redujeron las distancias, pero entre White y Fran Vázquez los locales consiguieron irse hasta los quince puntos de ventaja para desesperación de Luis Casimiro.Vasileaidis se unió a una fiesta que seguía dirigiendo un estelar Davin White para estirar las diferencias hasta los 23 puntos. El Santiago Martín disfrutaba con el acierto anotador de su equipo que llegó al descanso con 25 puntos de ventaja y el 55-30 en el marcador.

Tras el paso por vestuarios apenas cambió nada. Los de Katsikaris seguían dominando, con un gran Tobey en la pintura. Los visitantes eran claramente superados y tan solo Erikson, que llegó hasta los 20 puntos, era capaz de anotar. Los aurinegros se relajaron algo, pero aun así terminaron el tercer cuarto con un parcial de 18-15 que colocaba el 73-45 en el marcador.

El último cuarto empezó con un parcial de 0-5 para los amarillos. A pesar de la ventaja, Katsikaris no quería relajaciones y paró el partido enfadado con lo que estaba viendo. Los locales, con el empuje del público del Santiago Martí, volvieron a subir el nivel y entre Abromaitis y Tobey volvieron a estirar diferencias. Los grancanarios estaban totalmente fuera del partido y pedían casi a gritos que acabase un partido ya sentenciado y que acabó con el 92-71 en el marcador.