Atomic: el bar al que querrías ir

El antiguo Benjamín ha mutado en un nuevo pub de corte irlandés, con comida conceptual, una buena gama de cervezas de caña y el rock como hilo conductor.

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El antiguo Benjamín, el bar que durante 37 años funcionó y se convirtió en un referente en la ciudad de La Laguna, ha mutado en un nuevo pub de corte irlandés, con comida conceptual, una buena gama de cervezas de caña y el rock como hilo conductor. Sus dos impulsores son también dos agitadores culturales, Asdrúbal Marichal (cantante de This Drama) y Fernando Jiménez (regente del Aguere Cultural). Hablamos del Atomic.

Así, el mítico local del número 27 de Heraclio Sánchez, es ahora un renovado espacio que se proyecta desde la inquietud de sus creadores con la idea de convertirse en un punto de encuentro para los seguidores de la cultura rock: “Más allá del punto de vista meramente comercial, hemos intentado dar vida a un local al que a nosotros nos gustaría ir a tomar una cervezas”.


"Este local también nos servirá como eje común para hacer muchas de las producciones que estábamos haciendo antes. Es importante para nosotros que el Atomic se asocie con la música".

Y así arrancaron a mediados del mes de febrero después de 45 días casi intensos de remodelación del local en los que el Benjamín terminó de mutar en Atomic: “Obviamente el concepto es diferente al que tenía el antiguo Benjamín, pero la esencia se adaptaba mucho a lo que nosotros buscábamos, por ejemplo, la estructura de madera de su interior, que de alguna manera nos podía transformar a una ciudad como Dublin, o ese concepto de punto de encuentro de una zona local”.

Su horario de apertura es de martes a sábado de seis de la tarde a dos de la mañana. Atomic apuesta por una gama de cervezas originarias de la casa Guinness (algunas muy complicadas de encontrar en el área metropolitana e incluso en Tenerife) todas tiradas en caña, una oferta de concina diversa adaptada al concepto pub y una propuesta musical que va desde el blues rock hasta el hard rock.

El encargado de la cocina es el chef Eduardo Ruiz, al que desde un principio le han dado total capacidad creativa para generar una carta que introduce nuevos matices casi cada día. Su experiencia culinaria le llega de un amplio bagaje de viajes, trabajando en muchas ciudades distintas. “Tiene un fondo creativo increíble que lo ha sabido adaptar perfectamente al concepto de pub”.

Como no podía ser de otra manera, partiendo de dos personas íntimamente ligados con la escena musical de La Laguna, el Atomic tendrá también un importante corte y proyección cultural: “Se harán firma de discos y otras actividades. Además, este local también nos servirá como eje común para hacer muchas de las producciones que estábamos haciendo antes. Es importante para nosotros que el Atomic se asocie con la música, porque es parte de la esencia del local y es lo que lo unifica todo”.

Y para dejar claro su intención de agitar musicalmente la ciudad, Atomic ya tiene su primera cita indispensable para mayo bajo el nombre de “Atomic! Annual Bash”, que se celebrará en el Aguere Cultural y que sellará una de las pocas visitas al país de los punkrockers americanos Anti-Flag y de los canadienses Cancer Bats.
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Ambos, Asdrúbal y Fernando, ya tienen sobre sus espaldas una importante actividad laboral. ¿Qué les ha llevado ahora a iniciar es nueva andadura empresarial?: “Nos conocemos hace tiempo y hemos llevado a cabo varios proyectos juntos, sobre todo en lo referente a la producción musical. Creo que tenemos una manera de trabajar el uno con el otro que funciona.  Desde hace tiempo teníamos ganas de montar en La Laguna que de alguna manera estuviera relacionado con lo que ya hacemos.  Sobre esta idea inicial, empezamos a darle vuelta, con el objetivo también de recuperar para la Laguna un local que estuviera relacionado con la escena del rock, que en los últimos años, respecto a locales, ha estado un poco más difuminada”.

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