Una expulsión poco previsible

Al capitán se le culpa de autoexpulsarse y al técnico de no prever la reacción de su jugador.

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“Se veía venir”, “siempre es el mismo”, “todo el mundo lo sabía, menos Martí”, “otra vez Suso”, “un capitán no puede caer así en las provocaciones”... Tras el Tenerife-Granada, las voces de los aficionados –expresadas en el Heliodoro o en las redes sociales– repartían culpas entre Suso Santana y José Luis Martí al buscar un responsable de que el equipo blanquiazul jugara media hora en inferioridad.

Suso vio la primera tarjeta roja de la 'era Martí' tras 76 partidos, pese a su fama de caer con frecuencia en provocaciones

Al capitán se le culpa de autoexpulsarse y al técnico de no prever la reacción de su jugador. Ya se sabe que, a toro pasado, todos somos Manolete. Y que una vez acabado el partido, todos somos Guardiola (o Zidane, que lo mismo da). Y por eso muchos seguidores blanquiazules expresaban su rabia ante la supuestamente secular propensión a la expulsión de su capitán y la nula previsión del entrenador.

La realidad es que Suso se equivocó, pero la historia desmiente esa sensación colectiva de futbolista hermanado con las tarjetas rojas. De hecho, Martí no tenía antecedentes previos de ningún tipo para pensar que el capitán iba a dejar al equipo en inferioridad. Y es que la del domingo ante el Granada es la primera expulsión de Suso en la era Martí. Hasta entonces sumaba 75 partidos oficiales sin ese castigo.

Y el diez blanquiazul ha sido de los jugadores más utilizados por el técnico balear desde que llegara al banquillo del Heliodoro. De hecho, Suso acumula 76 partidos oficiales disputados a las órdenes de Martí y sólo es superado en esta clasificación por Vitolo (79). A continuación siguen otros históricos con pedigrí blanquiazul como Aitor Sanz (76), Dani Hernández (74), Raúl Cámara (68) o Carlos Ruiz (61).

La historia también demuestra que no sólo Suso ha tenido un comportamiento correcto en la era Martí, sino que la totalidad del equipo ha sabido evitar expulsiones innecesarias. De hecho, en los 84 partidos dirigidos por el técnico balear, el Tenerife sólo ha sufrido nueve expulsiones. Y de todas ellas, sólo dos, por tarjeta roja directa: Alberto y Carlos Ruiz, ambas en la campaña 15-16.

Ese curso también fueron expulsados por doble amonestación Raúl Cámara y Jorge, mientras que la pasada temporada las tres tarjetas rojas se las repartieron, siempre por doble amarilla, Jouini (en dos ocasiones) y Camille. Capítulo aparte merece la expulsión por protestar de Iñaki ante el Valladolid en Copa del Rey, pues estaba en el banquillo y no dejó a su equipo en inferioridad.

En la presente campaña, la primera expulsión ha llegado pronto. Y ha tenido como protagonista a Suso, que se equivoco al caer en la provocación de Baena (Granada) y, aún más gravemente, al llamar “sinvergüenza” al árbitro. Pero no había antecedentes que invitaran a pensar en una reacción semejante.