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Cultura

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria cancela el Festival Cero

El certamen de indie-rock, tras seis ediciones, pierde el apoyo del consistorio capitalino con el cambio de gobierno

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León Benavente, durante el concierto que ofreció en el Festival Cero de 2022. / QUIQUE CURBELO-LPA CULTURA

Las Palmas de Gran Canaria pierde una de sus citas, tal vez la más importante y consolidada, con el indie-rock: el nuevo grupo de gobierno del ayuntamiento ha decidido retirar su apoyo al Festival Cero, certamen que después de seis ediciones y tras ver desfilar por sus escenarios a Sidonie, Kase O, León Benavente, Xoel López, Love of Lesbian, Anni B. Sweet, Iván Ferreiro, Lori Meyers, Siniestro Total, Coque Malla, Morgan, Ginebras o Carolina Durante se verá obligada a colgar el cartel de cerrado por derribo.

La organización JeitoAlgato Producciones—, este miércoles, tras trascender la noticia en el ambiente cultural de la ciudad —las cancelaciones de grupos apalabrados y cerrados para el cartel de la edición de 2023 empezó a correr como la pólvora—, optó por guardar silencio y darse unos días antes de confirmar o desmentir la liquidación del Festival Cero.

Nueva programación

En el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria, requerido el concejal de Cultura —Adrián Santana— a petición de este periódico para tratar el asunto, la respuesta consistió en señalar que "el Festival Cero forma parte de la programación propia del ayuntamiento. Se está trabajando en la nueva programación". Ante la insistencia de una confirmación, un desmentido o una matización sobre su cancelación, el tema quedó zanjado con el siguiente mensaje: "se está trabajando en la programación".

Con el cambio de grupo de gobierno —el PSOE repite en la alcaldía y en el área de Cultura, pero con nuevas figuras al frente (Carolina Darias y Adrián Santana sustituyen a Augusto Hidalgo y Encarna Galván)—, durante las últimas semanas había trascendido un nuevo plan municipal que consistiría en reducir su aportación en festivales musciales de similares características —con una excepción: el Womad—.

Panorámica del Festival Cero durante una noche de la edición del año pasado. / QUIQUE CURBELO-LPA CULTURA

Ni un día de programación

El Festival Cero, que para asumir la nueva política financiera del consistorio había planteado la posibilidad de reducir a una jornada su programa para 2023 —con apuestas por la escena local y algún nombre con tirón a nivel nacional—, plantó en 2016 una semilla que  germinó en los siguientes años para dar forma a una de las citas más solidas del indie-rock de las Islas.

Con la zona anexa al Auditorio Alfredo Kraus como punto de encuentro, el certamen tomó forma y creció poco a poco en todos los sentidos: su oferta de ocio se multiplicó con jornadas matinales para las familias o diferentes opciones gastronómicas, todo mezclado con noches regadas de artistas y grupos de cierto tirón —dentro de un mercado cada vez más especializado frente a otros más populares entre la gente más joven—.

Artistas canarios

Para bandas y solistas locales, el Cero también fue una ventana por la que asomarse y darse a conocer o una caja de resistencia durante la pandemia. Birkins, Said Muti, The Good Company, Texxcoco, Mel Ömana, Solo Astra o Ant Cosmos también forman parte del relato que deja el festival.

El Festival Cero, al final, ha sido víctima del mismo desamor que cantaban Coque Malla e Iván Ferreiro. "Me dijo ven aquí y muerde; tú necesitas ser feliz. Soy el ángel de la muerte; y he pensado mucho en ti. Entonces quise escapar; despegarme de su cuerpo azul. Pero me dijo la verdad; y se escapó por la ventana. Me dejó marchar".