El Club Baloncesto Gran Canaria ha solicitado formalmente al Cabildo de Gran Canaria una financiación adicional de 500.000 euros para la temporada 2025/2026, con el objetivo de cubrir una situación coyuntural de tesorería que la entidad califica de crítica. La petición está firmada por su presidente, Sitapha Savané, y fechada el 19 de noviembre de 2025. Según ha podido saber Atlántico Hoy, este viernes se debatirá en el pleno del Cabildo la solicitud del club, por la vía de la urgencia.

El documento detalla que, al cierre del ejercicio 2024/2025, el club presenta un fondo de maniobra negativo de -754.219,51 euros, lo que significa que su activo corriente no es suficiente para afrontar las obligaciones a corto plazo. A pesar de que los primeros meses del ejercicio 2025/26 registraron flujos de caja favorables gracias al cobro de abonos y a la aportación del Instituto Insular de Deportes, la entidad advierte que esta mejora es transitoria debido a la baja actividad económica de los meses de verano.

Factores de riesgo estructurales y retrasos en pagos

En su análisis financiero, el club identifica varios factores estructurales de riesgo, entre ellos un periodo medio de pago a proveedores de 47,68 días, el retraso en los cobros de deudores, así como el peso especialmente elevado de los pagos de nóminas y obligaciones con las administraciones públicas.

Además, se menciona expresamente la incertidumbre en el cumplimiento de pagos por parte de Dreamland Studios SL, pues Newport adeuda al CB Gran Canaria varias mensualidades del patrocinio que tienen suscrito, que esta temporada está fijado en 500.000 euros, distribuidos en diez pagos de 50.000 euros cada uno. Según ha podido saber este periódico, la deuda asciende a más de 300.000 euros.

Para hacer frente a esta situación, el club ha puesto en marcha una batería de medidas internas, entre ellas la priorización de pagos a trabajadores y administraciones, la utilización de una línea de confirming de hasta 500.000 euros, la activación de una póliza de crédito por el mismo importe, la reprogramación de pagos a proveedores y la gestión directa para acelerar cobros procedentes del Gobierno de Canarias, la ACB y el propio patrocinador Dreamland.

Deuda con Dreamland y riesgos en ingresos públicos

Uno de los puntos más delicados del informe afecta directamente a Dreamland Studios SL, que adeuda actualmente 120.000 euros más IGIC del ejercicio 2024/2025 y otros 150.000 euros más IGIC correspondientes al ejercicio 2025/2026. El contrato vigente para la presente temporada asciende a 500.000 euros más IGIC, y en la previsión de tesorería se contempla, por ahora, el cumplimiento íntegro del acuerdo hasta junio de 2026.

El documento también alerta sobre riesgos importantes en el cobro de ingresos públicos. En concreto, se señala la posibilidad de retraso en 466.229,51 euros del contrato publicitario con el Gobierno de Canarias, así como en las subvenciones destinadas al proyecto Suma y al deporte base, por importes de 200.000 y 400.000 euros respectivamente. A ello se suma la devolución pendiente de una fianza de 131.442,19 euros por la finalización de un contrato anterior.

Más retrasos previstos y tensiones de tesorería

Como riesgo adicional, el club cifra en 250.000 euros una deuda correspondiente al Gobierno de Canarias inicialmente presupuestada para la temporada 2024/2025, cuyo retraso ha provocado un desajuste directo en la planificación financiera y ha generado, según el propio informe, tensiones de tesorería significativas.

También se contempla la posibilidad de retrasos por parte del Patronato de Turismo del Cabildo en el primer vencimiento del contrato 2025/26, así como por parte de la ACB en los derechos de televisión, de los que en octubre solo se habrían recibido 100.000 euros, cuando en temporadas anteriores a diciembre ya se había ingresado aproximadamente el 50% del total anual.

Un escenario de tensión financiera sostenida

El propio club resume el escenario como una situación de tensión financiera inmediata y continuada, motivada por el elevado volumen de obligaciones salariales y fiscales, un déficit estructural significativo y el desplazamiento temporal de ingresos ya presupuestados.

La conclusión del informe es contundente: la estabilidad y continuidad competitiva del CB Gran Canaria durante la temporada 2025/2026 depende de una inyección extraordinaria de liquidez que permita cubrir las obligaciones esenciales en los meses críticos. Esa inyección es, precisamente, la que el club solicita ahora al Cabildo por valor de 500.000 euros.