Iberostar Tenerife cae en su visita al equipo revelación

El Iberostar Tenerife ha caído ante el Montakit Fuenlabrada por 79-68 en la visita al equipo revelación de la presente Liga ACB. Los aurinegros estuvieron vivos durante gran parte del partido, pero los errores en momentos decisivos y el no cerrar del todo bien el rebote propiciaron la primera derrota liguera de la era Katsikaris.

Sin Ponitka y con un quinteto innovador con la presencia de Allen y Niang en la pintura salió el equipo aurinegro en Fuenlabrada. Los madrileños anotaron las primeras canastas del partido desde el tiro libre tras un inicio errático en ambos equipos. Los madrileños se pusieron 10-4, pero un parcial de 0-5 volvió a estrechar las diferencias hasta el 10-9 para enfado del técnico local. El final del primer cuarto siguió siendo gris, aunque los dos equipos anotaron hasta poner el 13-11 en el marcador.

El buen inicio de Richotti y Tobey en el segundo cuarto y el gran trabajo defensivo equilibraron el partido a 18. Los locales querían imponer su ritmo, pero los de Katsikaris seguían muy vivos en el partido. Rupnik y Vargas hacían daño en los madrileños. Paco Cruz con un triple puso el 32-26 en el marcador a 2 minutos del descanso. El mal final del segundo cuarto de los aurinegros permitió a los fuenlabreños coger una buena renta, pero un 2+1 final de Beirán puso el 36-32 para llegar al descanso.

Tras el paso por vestuarios el guión del partido cambió poco, los madrileños seguían por delante, pero no eran capaces de irse definitivamente en el marcador. Smits y Sekulic pusieron el 43-36 y obligaron a Katsikaris a parar el partido con un tiempo muerto. Dos triples de Richotti volvieron a poner a 3 puntos a los aurinegros. El buen trabajo de los fuenlabreños en el rebote permitió a los locales obtener la mayor diferencia del partido con el +12, aunque una canasta aurinegra bajó a 10 la diferencia hasta el 56-46 con el que terminó el tercer cuarto.

Con triplazo de Popovic empezó el cuarto definitivo. El capitán Nico Richotti quería echarse al equipo a la espalda e intentaba reducir las diferencias. Los triples locales seguían castigando a los de Katsikaris. Vasileiadis y Tobey volvieron a poner a 8 a los aurinegros a 3 minutos del final del partido. De nuevo el acierto exterior de los madrileños terminó decidiendo un partido que  al final reflejó el 79-68 en el marcador.