Tenerife y Málaga cerrarán este lunes en el Heliodoro a las 20.00 (hora canaria) la sexta jornada de LaLiga Smartbank. El partido se presenta como una difícil prueba para ambos conjuntos, que han protagonizado un inicio liguero por debajo de las expectativas. La derrota en la última fecha del campeonato liguero cortó la progresión de un Tenerife que cuajó en Ibiza su peor actuación en las cinco jornadas disputadas. Aunque fuera derrotado en sus visitas al Eibar y al Levante, el equipo competía en todos los partidos y en el Heliodoro dejó una buena imagen ante el Lugo, a pesar del empate. Con la primera victoria del curso ante el Racing los blanquiazules parecían haber ganado confianza pero después del partido en Can Misses volvieron las dudas. En la rueda de prensa posterior al partido Ramis mostró su enfado. El técnico perdona los errores pero exige siempre la máxima entrega de sus jugadores y, en Ibiza, el equipo no estuvo a la altura del estilo aguerrido que predica su entrenador.
Cuatro puntos de quince posibles es un botín discreto para un equipo que pretende consolidarse en la zona alta de la tabla, más aún si consideramos el estado actual de una plantilla que abarrota la enfermería. En cualquier caso el técnico confía en la amplitud de su plantilla para plantar cara al Málaga en el Heliodoro el próximo lunes y, desde la grada, los aficionados esperan que las bajas se traduzcan en más minutos para la cantera. Quien más opciones tiene es Teto, que ha participado en todos los partidos y podría disfrutar su primera titularidad en la posición de Dauda, lesionado ante el Racing. También se especula con que Ibra vaya ganando protagonismo en el mediocentro ante las lesiones de José Ángel, Javi Alonso, Sergio González y Pablo Larrea, además de las molestias de Corredera.
En defensa Ramis cuenta también con alternativas procedentes del filial pero es previsible que vuelvan a jugar Mellot, Sipcic, Carlos Ruiz y Nacho Martínez, con Soriano en portería. En el centro del campo se espera a Aitor Sanz, Corredera, Waldo por la derecha y Appiah o Teto por la izquierda. Arriba, Enric Gallego parece fijo para el técnico y, dependiendo de la evolución de sus molestias, podrían acompañarle Borja Garcés o Iván Romero.
Guede en la cuerda floja
Tampoco están satisfechos con el arranque liguero los aficionados del Málaga. Cuatro derrotas y una sola victoria componen el balance de los de Pablo Guede en liga hasta el momento. Después de un verano con fichajes como Rubén Castro, el exblanquiazul Fran Sol, Alex Gallar o Fran Villalba, el conjunto andaluz está protagonizando un inicio decepcionante de competición. También es cierto que arrastra bajas importantes, sobre todo en defensa, con las ausencias de Esteban Burgos, Unai Bustinza y Jonás Ramalho, jugadores llamados a reforzar la zaga pero sin continuidad en este inicio liguero debido a las lesiones.
Si bien la situación clasificatoria es anecdótica a estas alturas de campeonato, el Málaga es el penúltimo en la tabla y la afición ya ha mostrado su malestar por la marcha de este proyecto que no acaba de arrancar. Esta semana, en los muros del Anexo al Estadio de La Rosaleda aparecieron pintadas en las que se pedía la dimisión del entrenador y se criticaba la labor del director deportivo Manolo Gaspar y los gestores del club.
Aunque desde la entidad malagueña se apresuraron a borrarlas este martes y sustituirlas por uno de los lemas del club: "Memoria, compromiso y fe", los autores de las pintadas se tomaron la revancha el jueves y respondieron escribiendo en el muro "Tapar vuestras vergüenzas no os hace mejores, porque no tenéis memoria, ni compromiso ni fe". La convulsa situación en Málaga sugiere que Guede se encuentra ante su última oportunidad para enderezar el rumbo del equipo. Una derrota en el Heliodoro podría ser definitiva para el entrenador argentino.