El plan de LaLiga es que el fútbol profesional retorne a España el 20 de junio. Por tanto, todavía quedan cuarenta días por delante para que los jugadores tinerfeñistas se pongan a tono. Será una nueva pretemporada, tan o más exigente que la que se realiza en verano. Tras la reanudación de LaLiga SmartBank los chicharreros deberán disputar los once partidos en aproximadamente un mes, un reto difícil más aún con las altas temperaturas que se esperan.
Además de la puesta a punto desde el aspecto físico, que es muy importante para el estilo de juego de Rubén Baraja, también se trabaja con balón para recuperar las sensaciones perdidas durante el confinamiento. El CD Tenerife se encuentra duodécimo en la clasificación, con cuatro puntos de margen con respecto al descenso. Por ello, cualquier relajación se puede pagar caro.