No quiero volver a la misma historia de las últimas semanas. No cabe duda de que los árbitros han tenido unas actuaciones decisivas en contra de un Tenerife que mejoró muchísimo desde la llegada de Álvaro Cervera, pero que hoy no demostró esa mejoría. No fue el equipo mandón y con buen fútbol que vimos en esta última fase de la competición.

El VAR no quiso. Los árbitros no quieren que el Tenerife haga la hombrada de salvar la categoría. Y todo eso a pesar de que el juego de los blanquiazules no fue el de otros días bajo el mando de Cervera. Pero eso es una cosa clara y otra, aún más clara, es que el Comité de Árbitros no quiere que este equipo logre su objetivo.

Mal inicio, ocasión visitante

No empezó nada bien el Tenerife. Dejó que los futbolistas del conjunto vasco se hicieran desde el inicio con el dominio del balón y de esta forma se acercaron con algún peligro a la meta de Badía, que a los once minutos tuvo que intervenir para desviar un lanzamiento de Christian.

Los locales se desempeñaban con altibajos en el juego. Sergio González y Landázuri se veían con dificultades, con enormes problemas, para sacar el balón desde su terreno. Diarra y Bodiger se alejaban mucho de la zona defensiva tinerfeña y eso hacía que los zagueros tuvieran excesivas dificultades para poner el balón en el campo rival.

Ocasiones infructuosas

A pesar de este problema más que evidente, el Tenerife se estiró en escasas ocasiones y en una de ellas estuvo a punto de adelantarse en el marcador. Fue un centro de Yann Bodiger al que no llegó ninguno de sus compañeros en el área. 

Poco después, una vez más el francés cayó en el área, en una acción que pareció penalti. Y esa máxima pena pudo haber cambiado el signo del encuentro, pero el colegiado no vio nada punible. 

Se entretuvo el Tenerife después de esa jugada, buscando una decisión arbitral favorable, pero nada de nada. Este año, los colegiados no respetan al Tenerife. No podemos esperar que en algún momento favorezcan los intereses blanquiazules. Pero es que los locales en ese momento se olvidaron de sus rivales y se centraron en protestar al árbitro. Así llegó el gol del Éibar. Un desastre. 

Fallo imperdonable

El conjunto entrenado por Cervera se planteó que tenía que irse arriba en busca de un gol que le diera la igualada. Y en una salida del balón en el área del conjunto vasco Diarra interceptó el balón. Su pase dejó solo como la una a Enric Gallego ante el meta visitante, pero no acertó en el disparo.  

No son los árbitros. Bueno, no sólo los árbitros. El acierto que le falta el Tenerife en sus ocasiones de gol es una losa excesivamente pesada para el equipo. Y si se te presenta una oportunidad y no eres capaz de marcar, no eches la culpa al colegiado si no te pita un penalti. Es tu culpa por no acertar. 

Hay que olvidarse de los colegiados. Al Real Madrid ayer le pasó factura toda la parafernalia que rodeó al partido final de Copa. Al Tenerife le pasa factura cada fin de semana lo mismo, visto desde nuestra perspectiva. 

Nada de acierto

Cuando se acercaba el descanso, el Tenerife mejoró su posicionamiento sobre el terreno. Enric Gallego estuvo a punto, una vez más, de anotar. No acertó. 

Pero no había apoyos entre los futbolistas, nadie se ofrecía y de esta forma, a pesar del infructuoso dominio del balón, el Éibar salía airoso en la mayoría de las acciones. 

En los minutos finales del primer período, el conjunto canario estaba tan perdido en el campo que tenían que ser sus centrales, sobre todo Sergio González, quienes subían el balón en busca del área rival. Sin éxito, eso sí. Una primera parte para olvidar. Al Tenerife le hacía falta un cambio radical, no sólo de jugadores, también de mentalidad. 

Cambio de lateral

Álvaro Cervera cambió a David Rodríguez, con cartulina amarilla, por César Álvarez nada más iniciarse la segunda mitad. Pasó Jeremy Mellot a la zona izquierda, con lo que jugó desde entonces a pie cambiado. No es una posición desconocida para él. Sin embargo, eso habla claramente de la mala planificación veraniega e invernal de este CD Tenerife que no tiene un lateral izquierdo de garantías. 

Los cambios introducidos por Cervera parecieron darle otro aire al equipo y de esta forma, en una internada de César por su banda llevó el balón al área donde remató de cabeza Maikel Mesa. Gol del Tenerife. Pero… ¡Oh! No. Anulado. 

Otra decisión injusta

Otra decisión de un árbitro que perjudica a los tinerfeñistas. No hubo falta. Maikel cabeceó con dificultad casi cayéndose en el área, en pugna con un defensa. Otra decisión más que discutida contra el Tenerife. Con esto no hay quien pueda. El Tenerife no se puede salvar. 

Y así todo los tinerfeños pudieron igualar el encuentro. Fue en una fenomenal jugada de Luismi Cruz, que filtró un balón hacia Landázuri, que puso el esférico claramente para que Gallego anotara por fin. Los centrales otra vez tenían que cargarse al equipo a la espalda, esta vez el ecuatoriano como antes Sergio González. 

Los eibarreses no cejaron en su empeño de ganar el partido y anotaron un segundo gol, por parte de Corpas, que estaba en un claro fuera de juego. Toma y daca. El Tenerife se volcó, pero no había tiempo ni ideas para dar la vuelta al tanteo. Un empate que vale de poco. 

Tres puntos de nueve en los últimos tres encuentros no son números de un equipo que quiere salvarse, después de un principio de temporada aciago, el más negativo de los últimos tiempos.  

Ficha técnica:

CD Tenerife: Edgar Badía; Mellot, Landázuri, Sergio González, David Rodríguez (César, min.46); Aitor Sanz (Fabio, min.86), Bodiger (Cantero, min.75); Luismi Cruz, Diarra (Teto, min.61), Waldo Rubio (Maikel Mesa, min.61), y Enric Gallego.

SD Éibar: Magunagoitia; Cubero, Comas, Arbilla, Christian Gutiérrez; Sergio Álvarez, Peru Nolaskoain (Antonio Puertas, min.63); Corpas, Matheus Pereira (Arambarri, min.89), Guruzeta (Pascual, min.75), y Jon Bautista (Javi Martínez, min.82).

Árbitro: José Antonio Sánchez Villalobos, del Comité Andaluz. En el VAR estuvo el también andaluz Luis Mario Milla Alvéndiz. Amonestó a David Rodríguez (min.36), Corpas (min.45), Nolaskoain (min.45), 

Estadio: Heliodoro Rodríguez López, con capacidad para 23.000 espectadores. Acudieron 14.128 aficionados. En los prolegómenos del partido se rindió un homenaje, en forma de minuto de silencio, al papa Francisco y al periodista Domingo Álvarez, compañero de Radio Nacional de España, fallecido esta pasada noche. 

Goles: 

Min.14. Guruzeta remató desde el punto de penalti, absolutamente libre de marca, tras un pase de cabeza de Matheus Pereira (0-1)

Min.83. Landázuri regala un pase de gol a Enric Gallego, que esta vez no falla, solo frente a la línea de meta (1-1).