Cuando no se juega nada importante es normal que no pase nada con algo de fluidez. Tenerife y Racing de Ferrol comenzaron su partido de la trigésimo novena jornada de la Liga Hypermotion con todo perdido, después de una campaña plagada de errores.

Los dos equipos, ya descendidos a la Primera RFEF, demostraron con creces que en este partido no había nada importante en juego. Hubo poco fútbol y muchas imprecisiones, faltas continuas y escasez de ocasiones.

Aburrimiento general

Si acaso, fue el Tenerife el conjunto que más apretó en busca de la meta rival, aunque con poco acierto en la toma de decisiones. Las bandas, con Luismi y Waldo, además de los dos laterales, fueron protagonistas, aunque sin éxito.

El conjunto gallego se limitó a contener como podía, con pérdida de tiempo desde el inicio, con muy poca intención de hacer un buen encuentro de fútbol y de esta forma el aburrimiento fue continuo.

Protestas contra los árbitros

El árbitro valenciano Muresan Muresan fue pitado a su salida al campo, como protesta contra el colectivo por las desastrosas actuaciones de sus compañeros en los partidos de la actual temporada en los encuentros del Tenerife.  

Y aunque no empezó mal, a los 16 minutos amonestó a Aitor Sanz en una entrada exactamente igual a otra de un futbolista gallego, que concluyó sin tarjeta. Una vez más se demostró el mal nivel de los colegiados españoles.  Superada la media hora del partido llegaron las pocas ocasiones de los locales ante la meta de Jesús Ruiz. Primero, un lanzamiento de Mellot, que desvió a córner el meta del Racing, y después un cabezazo de Aarón Martín, que se le perdió a la derecha de la meta. 

Badía, un espectador más

Mientras tanto, Edgar Badía, el portero del CD Tenerife fue un espectador más de un mal partido. Se perdió la ilusión por seguir en la lucha por la permanencia y eso quedó más que patente sobre el terreno de juego. Nada de nada.

La segunda mitad cambió con las alteraciones introducidas por ambos técnicos. El racinguista, Alejandro Menéndez, colocó a Brais en la banda derecha y a Gelardo para reforzar el centro del campo. Cervera hizo tres cambios a la vez. Entraron Jorge Padilla -por el desacertado Enric Gallego-, Fernando Medrano -después de muchos partidos ausente- y Maikel Mesa. El mediapunta tinerfeño empezó su participación ya amenazado por una cartulina amarilla que le mostró el colegiado por una dura entrada que realizó en su primera intervención. 

El entrenador del Tenerife vio el partido de pie, junto a su banquillo, casi siempre con la vista perdida hacia el piso, algo que parecía mostrar su impotencia por lo que se veía en el campo. Ni cambios ni nada. Un desastre absoluto. La defensa quedó formada por cuatro laterales, con Mellot y Landázuri por el centro y Medrano a la izquierda, su posición natural. En la derecha se mantuvo César Álvarez. Esto habla claramente de la planificación nefasta de una temporada que ha terminado con el descenso de categoría.

Un partido para olvidar

Álvaro Cervera quemó sus naves con las entradas de Teto y Cantero a los 70 minutos de partido, en busca de mejoría, pero este no era el partido para buscar mejoría. Landázuri no hizo un buen partido, el centro del campo, ahora con Sergio González, intentó poner un poco de orden, pero aún así el público blanquiazul tuvo que sufrir el máximo desdén de toda la temporada. 

Un partido para olvidar, sin nada que destacar a no ser la ineficacia de los protagonistas, que en la próxima temporada, al menos en el Tenerife, deberán cambiar de aires debido a sus altas fichas y la nueva etapa blanquiazul. 

Ficha técnica

CD Tenerife: Edgar Badía; César Álvarez, Landázuri, Sergio González, Mellot; Aitor Sanz (Maikel Mesa, min.57), Aarón; Luismi Cruz (Teto, min.70), Diarra (Medrano, min.57), Waldo Rubio (Cantero, min.70), y Enric Gallego (Jorge Padilla, min.57).

Racing de Ferrol: Jesús Ruiz; Nacho, Puric, David Castro, Insúa (Aitor Gelardo, min.46); Álvaro Sanz, Josep Señé; Naim García (Brais Méndez, min.46), Josué Dorrio, Heber Pena (Rober Correa, min,75), y Álvaro Giménez (Jáuregi, min.83).

Árbitro: Sergiu Muresan Muresan, del Comité Valenciano. En el VAR estuvo el también levantino Iván Caparrós Hernández. Amonestó a Aitor Sanz (min.16), Naim (min.30), Enric Gallego (min.52), Mellot (min.56), Maikel Mesa (min.58), Dorrio (min.66) y Aarón Martín (min.90)

Estadio: Heliodoro Rodríguez López, con capacidad para 23.000 espectadores. Acudieron 9.006 aficionados.