La World Travel Market (WTM) de Londres 2025 llega en un momento de contrastes para el turismo en Gran Canaria. Las cifras de conectividad aérea previstas para la temporada de invierno 2025-2026 apuntan a un ligero aumento global del 3% respecto al año anterior, pero bajo esa aparente estabilidad se esconde un cambio de perfil en el visitante internacional que preocupa al sector y a los fondos de inversión con intereses en Maspalomas y Playa del Inglés.
Los datos muestran que los mercados tradicionales de alto gasto —Alemania, Escandinavia y Finlandia— reducen su capacidad aérea hacia la isla. Alemania recorta un 5,7% de sus plazas, pasando de 602.245 a 567.630 asientos, mientras Suecia (-15,6%), Dinamarca (-15,2%) y Finlandia (-17,1%) profundizan una tendencia que ya se percibía en 2024. En conjunto, estos mercados del norte de Europa restan más de 30.000 plazas hacia Gran Canaria, lo que se traduce en menos turistas de estancia larga y con mayor gasto medio.
Liderazgo británico
En sentido contrario, el mercado británico consolida su liderazgo con un crecimiento del 11,2%: de 486.653 a 541.181 plazas. Aerolíneas como Jet2 y Ryanair refuerzan su presencia con una estrategia de expansión agresiva en el Archipiélago, devolviendo protagonismo al Reino Unido como motor del turismo de invierno.
También crecen los flujos desde Países Bajos (+10,8%), Bélgica (+7,4%), Francia (+4,7%), Italia (+4,6%) y Portugal (+10%), mientras Austria (+48,5%) e Islandia (+102,4%) despuntan como mercados de nicho con alta fidelización.
Mercado peninsular
En total, el tráfico internacional hacia Gran Canaria alcanzará 2,1 millones de plazas, es decir, 61.444 más que el invierno anterior. Sin embargo, el mercado peninsular retrocede un 8,4%, hasta 954.718 asientos, lo que deja la oferta total de vuelos en 3.056.315 plazas, un descenso del 0,8% respecto al invierno 2024-2025.
En el sector hotelero del sur de la isla se impone la cautela. Los empresarios advierten que la diversificación de mercados no compensa la pérdida del cliente nórdico, un perfil que garantiza ocupación estable durante los meses de menor demanda. “El turista escandinavo es el que llena en enero y febrero, el que da estabilidad al invierno. Si lo perdemos, perdemos el margen”, reconocen fuentes empresariales.
Competidores recuperados
La recuperación de destinos competidores como Egipto, Turquía o Cabo Verde ha desplazado parte de la capacidad de los grandes turoperadores, lo que obliga a Canarias a redefinir su estrategia de rentabilidad. En palabras de varios analistas del sector, el escenario actual muestra que Gran Canaria mantiene su atractivo, pero enfrenta una batalla de precios y márgenes: más vuelos, sí, pero procedentes de mercados menos rentables y más sensibles al coste.
La WTM de Londres será, así, una cita clave para reconquistar al visitante del norte de Europa y reforzar la posición de Gran Canaria como destino de invierno frente a la competencia mediterránea y africana.
