Tenerife sigue en emergencia hídrica desde su declaración en mayo de 2024, y será revisable a partir de febrero. La gravedad de la sequía y su prolongación ha afectado gravemente a cultivos como el de la uva, fundamental e importante para la isla, por lo que se van a destinar 2.099.796,56 de euros al sector vitícola. 

La producción ha bajado considerablemente si lo comparamos con otros años causando una pérdida de renta. Se trata de unas ayudas extraordinarias aprobadas por el Consejo de Gobierno del Cabildo de Tenerife el pasado 20 de diciembre que irán dirigidas a quienes estén a cargo de una explotación.

La crisis económica que está padeciendo el sector es grave y sostener las explotaciones que no es tarea fácil. La producción se ha visto afectada por la prolongación de la sequía, a lo que se suma la falta de horas de frío para que el cultivo se desarrolle de manera normal. Esto ocasiona que la planta se debilite, y el cultivo se abandone, según apuntan desde la institución insular.

Requisitos 

Podrán acogerse a las subvenciones aquellos viticultores en activo en la isla de Tenerife, tanto personas físicas como jurídicas, que estén a cargo de explotaciones vitícolas con parcelas ubicadas en la isla. Entre los requisitos que se piden está haber experimentado una reducción de su producción en el 2024 respecto a la media registrada entre 2019-2023.

Asimismo los solicitantes deberán tener registradas dentro de los plazos establecidos las producciones de uva, todo ello mediante las correspondientes declaraciones de cosecha (de vendimia) ante el Instituto Canario de Calidad Agroalimentaria (ICCA), de los años 2023 y 2024.

Por último, encontrarse al corriente del cumplimiento de las obligaciones fiscales y no tener deudas con la administración pública. Tendrán que respetar estos requisitos el tiempo que dure la subvención así como 45 días desde el 25 de diciembre para presentar la solicitud. La ayuda a recibir por beneficiario no podrá superar el importe máximo de 10.000 euros. 

La gestión, a manos de entidades colaboradoras

Desde el Cabildo apuntan que ante el poco tiempo que queda para el cierre del presente ejercicio presupuestario y la necesidad de contribuir de manera urgente al sostenimiento de las explotaciones vitícolas afectadas por la sequía y el abandono de las mismas, se ha previsto articular la gestión de dichas ayudas mediante el nombramiento de entidades colaboradoras para mayor operatividad, celeridad y agilización en el reparto de las mismas.