El sector agrario rechaza la conexión marítima entre Fuerteventura y Marruecos

Asaga teme que su recuperación propicie la entrada masiva de mercancías de origen marroquí y, con ello, se propaguen plagas y enfermedades

Guardar

Imagen de transporte de mercancía. / Europa Press
Imagen de transporte de mercancía. / Europa Press

La Asociación de Agricultores y Ganaderos de Canarias (Asaga Canarias Asaja) ha expresado este miércoles su rechazo a que se reanude la conexión marítima entre Puerto del Rosario (Fuerteventura) y el puerto de Tarfaya (Marruecos) prevista para este año.

Señala Asaga en un comunicado que el sector agrario teme que la recuperación de esta línea propicie la entrada masiva a las islas de mercancías agrícolas y ganaderas de origen marroquí y, con ello, se propaguen plagas y enfermedades, tanto fitosanitarias como epizoóticas, que podrían acarrear pérdidas en las producciones locales, así como suponer un peligro para la cabaña ganadera.

Patógenos

La asociación dice que en Marruecos existen determinados patógenos vegetales como el virus del rugoso del tomate, recientemente confirmado por las autoridades fitosanitarias de ese país, o la falsa polilla (Thaumatotibia leucotreta), detectada en algunas frutas importadas a la Península.

Y añade que representan una "seria" amenaza para la agricultura canaria al afectar a decenas de especies arbóreas y diversos cultivos como aguacate, viña, olivo, caqui, granado, pimiento, tomate o berenjena, y "de ahí la preocupación de esta organización profesional agraria".

La posible entrada y propagación de ese tipo de insectos representaría además una vulneración de la Orden del 12 de marzo de 1987 relativa a la importación, exportación y tránsito de vegetales y productos, alega Asaga, la cual agrega que esa normativa actúa, en teoría, de barrera para frenar la llegada de plagas y enfermedades agrícolas a Canarias.

Fiebre aftosa

Otro aspecto que genera alarma es la presencia de epizootias en Marruecos como la fiebre aftosa, "altamente contagiosa, que afecta al ganado y en especial a los rumiantes", y si bien reconoce que los últimos brotes detectados han sido controlados indica que se desconoce hasta qué punto se puede seguir transmitiendo.

También apunta que detrás de la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), que afecta al ganado vacuno en la Península, podría estar un mosquito presente en Marruecos. En cualquier caso, concluye Asaga, "hay que entender que las medidas de higiene, alimentación y bienestar animal exigidas a los productores marroquíes son más laxas que las exigidas a los ganaderos comunitarios".

Además, Asaga pone el foco en la carencia de inspectores en los Puntos de Inspección Fronteriza (PIF) de Canarias situados en cada puerto del archipiélago. Eso, prosigue, significa que no se puede garantizar el control aduanero del tráfico de personas y mercancías procedentes de este país africano. Al no tratarse de contenedores, sino de transporte rodado, se dificulte todavía más cualquier inspección o vigilancia.

Análisis minucioso

Ante "este panorama", Asaga Canarias Asaja demanda al Gobierno de Canarias un análisis minucioso y en profundidad de las repercusiones que para el campo canario puede traer la reapertura de esta línea marítima, "alejada de esa imagen benévola vinculada exclusivamente a potenciar las relaciones económicas, sociales y culturales entre Marruecos y Canarias".

La presidenta de Asaga, Ángela Delgado, dice que "ceñirse solo a ver los beneficios no nos dejará ver los perjuicios que a corto y medio plazo puede acarrear esta medida a un sector económico como es la actividad agrícola y ganadera de las islas". 

Archivado en: