Un sistema de Inteligencia Artificial deberá evitar colisiones de aves con aerogeneradores

Esta herramienta es un condicionante esencial para la instalación de parques eólicos en Canarias, que deberán parar si hay riesgo de colisión

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Imagen del parque eólico de Barao de Sao Joao. / EFE (Facilitada por E.ON)
Imagen del parque eólico de Barao de Sao Joao. / EFE (Facilitada por E.ON)

La protección de las aves cada vez está más presente a la hora de aprobar la instalación de un parque eólico en las islas. Tanto es así que uno de los condicionantes que se ha incluido en los últimos años para la aprobación de los parques eólicos es la instalación de sistema de detección de aves automático basado en la inteligencia artificial que evite las colisiones de aves con los aerogeneradores. Un sistema que deberá tener la capacidad de realizar medidas disuasorias para evitar la colisión e incluso parar los aerogeneradores. 

La industria eólica ha avanzado en los últimos años en la creación de herramientas que eviten que las aves colisionen con los aerogeneradores, como son el caso del DTBird o IdentiFlight. Una cuestión de gran relevancia si se tiene en cuenta que el número de parques eólicos está en expansión para conseguir descarbonizar la generación eléctrica y que, según cálculos de SEO Bird Life, “en España podrían morir entre 19.000 y un millón de aves por año al colisionar con los aerogeneradores”.

Inteligencia artificial para proteger aves

La implementación de estos sistemas no es nada nuevo, pero su obligatoriedad sí lo es relativamente. Este enero, por ejemplo, la Generalitat de Catalunya ha obligado a una empresa a implementar “los sistemas tecnológicos de mayor eficacia, como cámaras de visión artificial estereoscópica” para evitar la colisión con aves, según ha publicado La Vanguardia. Al menos desde 2021 una exigencia similar se puede ver en algunas Declaraciones de Impacto Ambiental de parques eólicos que se proponen en las islas. 

“Tiene que tener la capacidad de realizar acciones disuasorias e incluso la parada automática del aerogenerador implicado en una posible colisión”, establece uno de los condicionantes de las Declaraciones de Impacto Ambiental del Parque Eólico Ajuy, en Gran Canaria, o del Parque Eólico Laja Blanca, en Tenerife, recientemente aprobados. 

Predecir el vuelo

Este sistema basado en la inteligencia artificial deberá predecir el vuelo de las aves y disuadirlas en el caso de que fueran a colisionar con el aerogenerador “e incluso la parada automática del aerogenerador implicado en una posible colisión”. Pero la exigencia del sistema no acaba ahí. Este deberá estar asociado a una plataforma online donde la Administración podrá analizar estos datos y “acceder a los datos en bruto de los vuelos registrados, los vídeos grabados, las variables ambientales y de los parámetros de funcionamiento de los aerogeneradores, así como a la obtención de informes, gráficos y estadísticas”. 

Estos sistemas se basan en la instalación de diferentes cámaras en los parques eólicos que monitorizan los vuelos de las aves y calculan cuál será su recorrido a través de la inteligencia artificial, de manera que cuando identifican que un ave va a colisionar con la pala de un molino el sistema puede reproducir un sonido que ahuyenta los pájaros o incluso parar el aerogenerador para evitar el choque. 

Monitorizar las colisiones

En adición a esta herramienta, desde hace varios años se exige a los promotores que realicen un seguimiento de las colisiones de aves y quirópteros durante toda la vida operativa del parque eólico mediante la búsqueda de cadáveres o restos y trasladar a la Consejería de Transición Ecológica los datos anualmente en un informe. Estos informes deben partir de un trabajo mensual (quincenal los dos primeros años de vida). 

A su vez, cuando se detecte algún ejemplar accidentado, se deberá poner en conocimiento del Cuerpo de Agentes de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife, sin manipular el cadáver del ave “evitando su manipulación y garantizando su conservación en el lugar del hallazgo”. 

Entre los condicionantes de los parques eólicos anteriormente mencionados también se añade el estudio de un ciclo anual sobre la presencia de especies de murciélagos, su abundancia y su uso del espacio, un informe que deberá estar realizado por expertos en quirópteros.