El sector veterinario canario se siente desprotegido y con muchas carencias que cubrir. Al igual que otros sectores, la pandemia hizo mella para muchos negocios veterinarios, lo que causó que llegaran a tener perdidas de facturación mayores al 40%
A pesar de que recuperaron rápido de las perdidas de la pandemia, explican que en la actualidad se enfrentan a numerosos gastos derivados de la inflación, por lo que algunas clínicas han sido compradas por grandes superficies, algo que, según el sector, es una practica que se está volviendo muy habitual.
Atlántico Hoy ha hablado con la Asociación Empresarial Veterinaria de Tenerife (AEMVETE), la cual agrupa a veterinarios empresarios del sector de las clínicas de pequeños animales, para conocer la actualidad del sector tras la pandemia y la crisis provocada por la inflación, así como los objetivos de cara a la ley de protección animal y peticiones a las administraciones como más flexibilidad para mantener su actividad.
''Somos personal sanitario''
Durante el confinamiento, los veterinarios lucharon porque se les incluyera dentro de los servicios esenciales, algo que no sucedió al principio. Daniel, portavoz de AEMVETE, explica que las clínicas tuvieron perdidas importantes en los primeros meses ya que no les incluyeron dentro de los servicios esenciales. ‘’No sabíamos muy bien si podíamos trabajar o no, tuvimos pérdidas de más del 40% y luchar a nivel nacional para que el Gobierno nos reconociera como trabajadores esenciales''.
Además, en pandemia se enfrentaron a las subidas de precios y escasez de equipos de protección que siempre habían usado como mascarilla, guantes o batas debido a la alta demanda causada por la COVID. ‘’El precio de una caja de guantes pasó de 25 a 50 euros o a no haber stock. Actualmente el gasto que tenemos en estos equipos es del 5% de nuestra facturación global’’.
Grandes superficies
Daniel explica que la compra de clínicas veterinarias por parte de las grandes superficies ha crecido en los últimos años, motivada especialmente porque los pequeños empresarios no pueden muchas veces hacerse cargo de trámites o costes como impuestos. En este sentido, como demanda para mejorar el sector y evitar que sigan desapareciendo clínicas, pide a las administraciones diálogo y flexibilidad.
Desde el sector piden a las administraciones publicas dialogo y flexibilidad. ‘’Tenemos muchas limitaciones, pero no se nos brinda ayuda. Recibimos muchas inspecciones, y estoy totalmente de acuerdo con ellas para hacer un sector mejor, pero también deberían poner en valor el buscar soluciones a los problemas que tenemos. A veces no podemos hacernos cargo de todo lo que nos piden, y las grandes empresas sí, por eso compran ’’, explica Daniel.
Otra de las mejora que plantea es en base a la Ley del Medicamento. ’Está en plena explosión y esto afecta directamente al paciente. Nuestra forma de trabajo antes era más flexible, y ahora cada vez hay más lucha interna en cuanto a esta ley ya se están generando problemas a la hora de tener claro las aplicaciones que podemos ofrecer de los medicamentos. Es una lucha compleja y a nivel empresarial se está intentando solventar’’
Ley de Protección Animal
La Ley de Protección Animal ha causado revuelo en la sociedad. Aunque su borrador ya está conformado, todavía la nueva normativa no se ha comenzado a aplicar. En este sentido Daniel cree que dicha legislación es necesaria y asegura que el texto está ''bien planteado'', pero insiste en que a la hora de su aplicación posiblemente ''tenga muchas lagunas''.
‘’La Ley hacia falta, y la gente tiene que entenderla. Aun así, no se si estamos preparados ya que se quiere abarcar mucho, pero ¿con qué medios?, ¿cómo se va a adaptar? Creo que debería entrar de manera natural y paulatina’’, explica.
En base a esto, asegura que habrá que actuar antes las subidas de precio por la inflación y la aplicación de la nueva ley. ‘’La gente se queja de que somos caros, pero no se dan cuenta del nivel de gasto que lleva una clínica que este organizada y cumpla la normativa’’, subraya.