La gestión de los servicios públicos en los municipios siempre está sujeta a una fuerte fiscalización, tanto política como ciudadana. En el caso de La Laguna, uno de los asuntos recientes que más debate ha suscitado ha sido la anulación del contrato de alumbrado público por parte del Tribunal de Contratos de Canarias. La resolución abre un debate no solo jurídico, sino también sobre la transparencia en la contratación y la responsabilidad de los órganos políticos y administrativos. 

Más allá de los contratos de servicios, La Laguna afronta también la compleja gestión de sus infraestructuras urbanas. Son casos como el del cierre del camino El Cañaveral, donde los vecinos han anunciado acciones judiciales contra el consistorio, o el litigio con la empresa funeraria Mémora, relacionado con el acceso al tanatorio del Cristo y con el uso de un espacio público de gran valor simbólico y cultural para la ciudad. La Plaza del Cristo no es solo un enclave central para el ocio y las festividades laguneras, sino también un punto neurálgico en la vida social del municipio, lo que complica la compatibilidad de su uso con actividades de carácter funerario.

El alcalde de La Laguna, Luis Yeray Gutiérrez, aborda en Atlántico Hoy algunos de los principales focos de debate que marcan la actualidad municipal. Desde la repercusión administrativa y política de la anulación de un contrato estratégico, hasta la gestión de conflictos vecinales y empresariales en torno a infraestructuras clave.

PREGUNTA Sobre la anulación del contrato de alumbrado, ¿qué ha pasado, cómo ha podido pasar y qué responsabilidades políticas o administrativas va a haber?

RESPUESTA: Es una cuestión meramente administrativa. Un tribunal se ha pronunciado con la adjudicación de un contrato, del cual quiero poner de manifiesto que respaldo total y absolutamente al funcionariado de esta casa, que ha demostrado durante todos estos últimos años una pulcritud total y absoluta. En este caso, hay una solicitud por parte de una de las empresas que concurren a este servicio que entiende que hay irregularidades. Nosotros seguimos manteniendo el firme compromiso de que en este ayuntamiento se hace todo con total transparencia, luz y taquígrafo, y evidentemente a partir de ahora tendremos que ver en profundidad este informe que ha hecho el Tribunal de Contratos para tomar decisiones internas.

En agosto, Canarias7 informó de un caso similar en Puerto la Cruz con los mismos actores: la misma funcionaria y la empresa de su marido. ¿Conocían este caso? 

Vuelvo a reiterar que el respaldo al funcionariado de la casa es total y absoluto. Lo que se tenga que pasar después de esta comunicación que ha hecho el Tribunal de Contratos, lo decidirá la propia asesoría jurídica de este ayuntamiento. Hasta el día de hoy, que yo sepa, todos los informes, incluso hasta los de la Junta de Gobierno cuando se hizo finalmente la adjudicación del contrato a la UTE IMESAPI–EMELSA, están avalados. Quiero poner de manifiesto que hay un informe que se pidió desde alcaldía para ver si había cualquier tipo de duda con respecto al adjudicatario y era claro. Es totalmente apreciable en ese informe que no se menciona absolutamente ninguna irregularidad o cuestión que ponga en duda el trámite que se ha realizado en esta administración local.

Hablando sobre otros litigios recientes, sobre el caso del camino El Cañaveral muy recientemente supimos que unos vecinos querían llevar al ayuntamiento a los tribunales.

Entiendo perfectamente el malestar que puedan tener varios vecinos de ese entorno, por la situación compleja que hay en este entorno de la ciudad. Hablamos de unas de las arterias principales de acceso al centro, pero también hablamos de una situación de inseguridad manifiesta para todos los vecinos de la calle El Cañaveral. Hace mucho que se ha intentado por parte del ayuntamiento buscar una solución que pueda solventar esas dificultades, entre otras muchas la adquisición del suelo por parte del Cabildo. Tenemos para esa zona proyectada una urbanización, es decir: acerado, ampliación de la carretera y, sobre todo, un retranqueo del suelo que tiene que ver con el antiguo destacamento de los militares. Ahora mismo es una vía donde el continuo pasar de vehículos es un auténtico peligro para los propios vecinos por no tener ni tan siquiera señalización vertical porque era imposible colocarla en este tramo. Sabemos perfectamente que el cierre de la calle provoca un desplazamiento de unos 500 a 700 metros para bordear el paso. No obstante, siempre ha primado nuestra voluntad de que los vecinos de ese entorno estén a salvo. De la misma manera que hay vecinos ahora exigen otra solución al ayuntamiento, también hay solicitudes por parte de los propios vecinos afectados de esta calle porque era imposible la convivencia. ¿Qué hemos hecho? Facilitar el paso al servicio público, es decir, mayoritariamente al sector del taxi, y limitar el acceso a los vecinos a un máximo de 20 km/h. Y en los próximos meses veremos cómo va mejorando.

En la misma zona hay otra amenaza de contencioso que había presentado Mémora por el acceso al tanatorio del Cristo.

En cuanto a Memora, nosotros siempre hemos sido muy tajantes a la hora de comunicar formalmente a la empresa lo que queremos. Es que el uso de la plaza sea exclusivo para el ocio y la multifunción de acciones que se hacen dentro de ese entorno. Le hemos propuesto una alternativa, que consistía en permitirles que entrasen por el aparcamiento de Muvisa, que es titularidad municipal, y que hiciesen un acceso directo desde uno de los laterales de este aparcamiento. Otra propuesta fue que entraran por un lateral. El acceso que da precisamente a la calle El Cañaveral. Son cuestiones que, evidentemente, requieren por parte de la empresa una inversión importante, pero a día de hoy este ayuntamiento no ha tenido respuesta. Hemos intentado negociar hasta el último minuto porque sabemos perfectamente que en este entorno va a haber conflicto de intereses. Nosotros queremos hacer valer lo público y ellos tienen que hacer valer su negocio. Pero pongo un ejemplo muy claro. Imagínense unas fiestas del Cristo o un gran concierto y que tenga que pasar un coche fúnebre por el medio de la plaza cuando está abarrotada. ¿Cómo lo hacemos? Uno de los núcleos más importantes de desarrollo del ocio y la cultura que tiene esta ciudad es la plaza del Cristo. Evidentemente, tenemos que llegar a un entendimiento. Creo que no es descabellado que el ayuntamiento traslade alternativas a Mémora para que pueda seguir prestando sus servicios.