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Opinión

¿Es Credit Suisse el nuevo Lehman Brothers?

3 minutos

Mi respuesta es NO. Pero claro, sería poco ético contigo, querido lector, contestar esto y cerrar el artículo. Así que voy a explicar porqué, aun pudiendo haber similitudes, no estamos ante un nuevo caso Lehman Brothers.

Recordemos que el caso de Lehman Brothers fue el de la mayor quiebra de Estados Unidos. La caída de la compañía de servicios financieros en 2008 tuvo unas consecuencias sistémicas desastrosas sobre la economía que se extienden hasta nuestros días.

CDS: ¿Qué son y que importancia tienen?

Hace unas semanas, Credit Suisse protagonizaba una subida muy vertical de sus CDS e incluso se llegó a hablar de un posible default o suspensión de pagos.

Empezaremos con los CDS (acrónimo de Credit Default Swap en inglés):

En esencia, un CDS es un seguro que cubre al tenedor del riesgo ante el impago de un préstamo o de otro producto financiero. Es decir, un inversor que compra un título de deuda    -pública o privada- puede comprar un CDS para protegerse en caso de que el emisor del bono entre en quiebra o suspensión de pagos.

¿Y qué implica una subida de la prima (o precio) del CDS? Pues que quien lo contrata, tiene que pagar más para cubrirse. Y esta subida de precio está relacionada directamente con un aumento del riesgo sobre los productos que se están asegurando. Por ejemplo, si vivimos en una casa donde el riesgo de inundaciones ha aumentado, el seguro nos va a subir la prima por asegurar nuestra casa ante este hecho.

La subida de precio de los CDS de Credit Suisse implica que el mercado percibe la situación actual de la firma como que podría acabar en una posible suspensión de pagos. Por eso, sube el seguro y, automáticamente, se desploma el valor de sus títulos en bolsa. Por simplificar al extremo, sus acciones son los inversores que apuestan por ellos (y estas han caído un 52% en lo que llevamos de año); el precio de los CDS, los que apuestan en su contra (y no hacen más que subir).

En este caso, el precio de los CDS de Credit Suisse se ha disparado hasta (agárrense que vienen curvas) casi el doble de los niveles de la crisis financiera, y se asemejan a los de Lehmann Brothers antes de su caída en 2008.

Entonces, ¿por qué creo que no va a caer?

En primer lugar, porque los niveles de solvencia exigidos a la banca en Europa son mucho mayores que los de entonces, gracias a la regulación bancaria existente post crisis financiera (llamada Basilea III).

En segundo lugar, porque ya vimos el cataclismo que supone dejar caer un banco de esa magnitud (la llamada doctrina too big to fail, algo así como demasiado grande para permitir que quiebre). Muchos bancos han sido rescatados o pseudo rescatados después de eso porque nadie quiere lidiar con las consecuencias directas y sobre todo con el efecto contagio que implica una caída así.

Además, en este caso, Credit Suisse es un banco comercial, esto significa que dentro hay muchos ahorradores, cosa que le diferencia enormemente del caso de Lehman Brothers.

¿Cuál es el plan?

Los primeros pasos que ha dado el banco es comenzar la venta de activos para ganar tiempo (algo parecido a las palancas del Barça) y se prevé una ampliación de capital posterior para tratar de frenar las turbulencias.

De hecho, en la última semana su valoración en bolsa ha aumentado un 10%, aunque yo esto no lo pondría como una señal inequívoca de recuperación, ya que ahora mismo es un valor que es presa fácil para especuladores, tanto los que compran acciones, como CDS.

La fecha clave para saber más será el 27 de octubre cuando el banco suizo va a hacer público su plan estratégico donde se espera que tome el camino que ya recorrió Deutsche Bank hace tres años. Esta ruta pasa por: recortar o cerrar su banca de inversión, reestructurar la plantilla financiada con una ampliación de capital y dar un giro al negocio.

De todas maneras, deberemos estar atentos porque la situación de inestabilidad económica no hace más que crecer. Esta crisis global se prevé que será profunda y larga. De muchas pequeñas heridas, y no de un crash puntual, pero todo puede cambiar de un día a otro.