Un avión de TAP Air Portugal, que volaba entre Lisboa y Cabo Verde, ha tenido que desviar su trayecto y aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Gran Canaria para facilitarle atención médica a un menor, según explica el colectivo de los controladores aéreos en las redes sociales.

El aeropuerto de Gran Canaria activó los protocolos de emergencia tras recibir la comunicación de la tripulación, dándole prioridad en la maniobra de aterrizaje frente a otros aviones.

Rapidez

La aeronave recibió autorización para un descenso continuado y una aproximación directa a la pista 03L, aterrizando con prioridad 40 minutos después del aviso, explican los controladores.

Durante ese tiempo, el personal del aeropuerto coordinó la intervención de los servicios médicos en tierra para garantizar que el menor fuera atendido tras el aterrizaje lo más rápido posible.