Agentes de la Policía Nacional, adscritos a la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Las Palmas, en colaboración con la Policía Local de Las Palmas de Gran Canaria, han detenido a El Guaca, un conocido delincuente de 47 años de edad con 47 detenciones previas y 24 años de condenas firmes por delitos contra la salud pública.
La operación, desarrollada en el barrio de San José, permitió desarticular un activo punto de venta de drogas que llevaba tiempo generando inseguridad y conflictos vecinales. Junto a El Guaca fue arrestada su pareja, que también participaba en la venta directa de sustancias estupefacientes a los consumidores.
Punto vigilado
La investigación, que se prolongó durante varios meses, reveló que el inmueble estaba fortificado con fuertes medidas de seguridad para impedir la entrada policial. Además, la pareja contaba con una red de aguadores, personas toxicómanas que vigilaban los alrededores del edificio a cambio de dosis, alertando de la presencia de los agentes.
Según la Policía, el punto de venta funcionaba las 24 horas del día, convirtiéndose en uno de los principales focos de tráfico de drogas del distrito. En lo que va de año, los agentes habían intervenido en la zona más de 155 veces, con 70 actas por tenencia o consumo de drogas en un radio de apenas 200 metros.
Registro e incautación
El miércoles, 14 de octubre, con autorización judicial, se llevó a cabo una entrada y registro en el domicilio de El Guaca. Durante la intervención, los agentes incautaron 1,3 kilos de heroína (incluidos 248 envoltorios listos para su venta), 88 dosis de crack, más de 400 gramos de cocaína, 17.000 euros en efectivo, joyas y numerosas armas blancas.
En el operativo participaron también unidades especializadas como el GOES, la UPR, Sistemas Especiales, Subsuelo y Guías Caninos, garantizando una actuación coordinada y segura.
Tras la práctica de las diligencias policiales, los dos detenidos pasarán a disposición judicial este jueves. La Policía Nacional calificó el resultado como “una operación clave para la seguridad ciudadana” en un barrio afectado durante años por el tráfico de drogas.