La Gala del Trono Infantil del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria vivió este sábado momentos de tensión entre aglomeraciones, padres nerviosos y un escupitajo al vigilante de seguridad. Así queda reflejado en un informe interno de la Policía Local del municipio, al que ha tenido acceso Atlántico Hoy, dirigido a la jefatura del cuerpo de seguridad.
El documento, que narra la intervención realizada por unos agentes, solicita a los altos mandos “un servicio sólido de orden público” en eventos con mucha afluencia de público. Cuando los policías recibieron el reparto de tareas, todo apuntaba a que el día iba a ser tranquilo — o, al menos, sin sobresaltos—, pero nada más lejos de la realidad.
La llegada
Después de escoltar a los equipos que disputaban las semifinales de la Copa del Rey de baloncesto desde el Hotel Iberia hasta el Gran Canaria Arena debían estar presentes en el parque Santa Catalina para acudir a la Gala del Trono Infantil a las 19:00 horas porque debe existir presencia policial allí en todo momento.
Al coger el relevo, la unidad que se encontraba por la zona les comunica que el ambiente estaba empezando a observar nerviosismo por motivos de aforo entre las personas que quieren acceder al evento por motivos de aforo. El conflicto estaba a punto de desatarse y los medios para enfrentarlo eran, al parecer, insuficientes.
Aglomeración de personas
En ese momento, la unidad se queda sola porque los agentes que habían estado por los alrededores hasta el momento tuvieron que irse por un incendio en el barrio de La Milagrosa. La Sala del 092 les pide a las 20:05 horas que se personen en la puerta de acceso más cercana a la calle Luis Morote “debido a la aglomeración de personas que quería acceder”.
“Se estaban acumulando en el vallado que delimita el recinto y se veían desbordados con riesgo de que pudiera ceder y crear una avalancha humana”, resalta el informe. “Personados en el lugar, los agentes se ven obligados a intervenir solos para mediar entre las partes, debido a que las zonas de acceso se encontraban cerradas”, continúa.
La entrada, bloqueada
“No dejaban”, expone, “entrar ni salir del recinto”. Además, resalta que la mayor parte de usuarios involucrados eran padres de los menores que actuaban en la Gala y que se quejaban de la mala organización del evento a la hora de permitir recoger a sus hijos e hijas.
El informe pone de manifiesto que el nerviosismo de ciertos padres conllevó a que la actuación policial se realizara de forma contundente, “ya que llegaron a escupir a uno de los vigilantes de seguridad”.
"Hubo descoordinación"
Pero la cosa no queda ahí porque los agentes se plantearon detener a una mujer por desobediencia, aunque al final desistieron porque se encontraban en inferioridad numérica. La imposibilidad de solicitar colaboración a otras unidades por falta de efectivos disponibles tampoco ayudó.
Cuando los ánimos se calmaron, los agentes se entrevistaron con el director del plan de seguridad, quien manifestó que “hubo descoordinación entre los padres de los menores que allí actuaban y la dirección del evento”.
Aforo real
Los policías se vieron desbordados debido a que la previsión de aforo era menor al que de verdad había —se estimó la presencia de más de 2.500 personas—, “decidiendo en el momento abrir todas las puertas y habilitar dos más para que el acceso y la salida se realizara de forma fluida sin contratiempos”.
Los policías piden que los eventos relacionados al Carnaval 2025 tengan un “servicio sólido de orden público” con un número de agentes acordes con la afluencia de personas estimada. “No un control básico por una patrulla de dos componentes, ya que compromete la integridad física de los policías que realizan el evento”, sentencian.
Pautas
A raíz de los hechos, la Plataforma de Sindicatos de la Policía Local y Agentes de Movilidad de Las Palmas de Gran Canaria ha emitido un comunicado donde piden respetar una serie de pautas para garantizar la integridad de los agentes:
- La unidad comisionada acude (asegura que nunca se niegan) interesándose por el número de asistentes si no se facilita esa información, solicitando de antemano colaboración de otras unidades.
- Llegados al lugar se realiza valoración desde una distancia prudencial y, en su caso, se informa a la sala del CEMELPA que no se interviene en tanto en cuanto se personen más unidades de apoyo, ya sean de Policía Local o de otros cuerpos policiales.
- Ante cualquier resultado de lesión física o psíquica asistir al centro médico para valoración facultativa.