La Sociedad Municipal de Gestión Urbanística de Las Palmas de Gran Canaria (Geursa) ha trasladado a la Fiscalía posibles irregularidades detectadas en el desarrollo de su actividad, en concreto en la tramitación de una obra de construcción de 74 viviendas en Tamaraceite. Así lo informó este miércoles Mauricio Roque, concejal de Planificación, Desarrollo Urbano y Vivienda del Ayuntamiento y presidente del Consejo de Administración de la empresa pública.
Las anomalías afectan a errores de cálculo en las mediciones y el hormigón empleado en la cimentación de la estructura.
Estos fallos o desajustes fueron subsanados entre el equipo de la empresa constructora y la dirección de obra, pero sin seguir los procedimientos establecidos, mezclando lo acordado en el proyecto original con modificaciones que no se tramitaron por el cauce adecuado.
A medio hacer
Los 74 pisos están aún a medio construir y lindan con otra promoción de vivienda pública en Tamaraceite que si está terminada y pendiente de entregar a los adjudicatarios por parte del Ayuntamiento.
Gustavo Sánchez, concejal del PP en la oposición, cuestionó en el último pleno los retrasos del grupo de gobierno en la entrega de esas casas, evidenciando el problema que arrastra Urbanismo con la gestión y la planificación de la obra pública, sobre todo tras el cese de la gerente de Geursa y la querella en curso de la Fiscalía contra sus principales dirigentes.
Retrasos
Los retrasos en la ejecución de esos proyectos no solo afectan a las familias, la planificación municipal y la obra nueva, sino que revelan irregularidades como la detectada ahora por el propio equipo de Mauricio Roque.
El edil convocó a los medios de comunicación para informarles de la situación, pero no dio detalles de "los hechos" ni de "los sujetos" responsables de las supuestas ilegalidades.
Sólo aclaró Roque que estas nuevas anomalías surgieron en el marco del proceso de cumplimiento normativo (compliance) que se ha implementado en Geursa para garantizar el correcto funcionamiento y prevenir riesgos. “Se han detectado una serie de actuaciones que no se ajustan a las normas reguladoras”, señaló el edil.
Cumplimiento normativo
El compliance es un sistema de control interno basado en normativas internacionales como la ISO 19600, ISO 37001 y UNE 19601, que permite identificar y corregir posibles desviaciones en el funcionamiento de entidades públicas y privadas. En este caso, ha servido para alertar sobre actuaciones que podrían no ajustarse a la legislación vigente.
Según explicó Roque, el protocolo de compliance establece que, al detectar irregularidades, el proceso debe ser suspendido y las pruebas recopiladas deben ser trasladadas a la Fiscalía, que será la encargada de determinar si los hechos constituyen alguna falta administrativa o delito penal.
El concejal aseguró que desde Geursa se actuará con total transparencia y que el objetivo principal es garantizar el buen funcionamiento de la entidad, evitando cualquier tipo de actuación irregular.
Presunción de inocencia
Mauricio Roque insistió en que la empresa municipal respetará en todo momento la presunción de inocencia de todas las personas que puedan verse implicadas en este procedimiento. Asimismo, se comprometió a adoptar las medidas necesarias para mejorar los sistemas de control y asegurar la legalidad en todas las operaciones.
“Este proceso demuestra que los mecanismos de control interno están funcionando. No podemos permitirnos que haya dudas sobre la gestión de un organismo público, y por ello hemos puesto en conocimiento de la Fiscalía cualquier indicio que pueda requerir una investigación más profunda”, añadió Roque.
Desde Geursa se insiste en que este tipo de procedimientos de cumplimiento normativo no solo garantizan una mayor seguridad jurídica, sino que también refuerzan la confianza de la ciudadanía en la gestión municipal.
Las próximas semanas serán clave para conocer si la Fiscalía determina que las irregularidades detectadas tienen consecuencias legales o si simplemente se trata de incidencias administrativas que pueden corregirse con medidas internas.
Transparencia municipal
Geursa reafirma su compromiso con la legalidad y la estabilidad en la gestión urbanística de Las Palmas de Gran Canaria. La implantación del compliance forma parte de un esfuerzo por modernizar la administración pública y hacerla más eficiente.
En este sentido, el ayuntamiento ha señalado que continuará implementando medidas que refuercen el control interno y la fiscalización de las actividades municipales para evitar cualquier tipo de práctica irregular o corrupta.
El caso ha despertado expectación en el ámbito político y ciudadano, dado que Geursa es un organismo clave en la gestión del desarrollo urbanístico de la capital grancanaria y se ha visto salpicado recientemente por el caso Valka. Ahora, todas las miradas están puestas en la investigación de la Fiscalía y en las posibles consecuencias de las irregularidades detectadas.
