Si piensa en el callejero de Las Palmas de Gran Canarias, ¿cuántas calles es capaz de mencionar? ¿y cuántas de ellas tienen nombre de mujer? Las calles cuentan la historia de la ciudad, pero también revelan una desigualdad que quizás pasa desapercibida: la escasa presencia de nombres femeninos en su nomenclatura. 

Con más de 2.000 vías, apenas 146 están dedicadas a mujeres, lo que representa un 6,5 %. Así lo refleja un análisis elaborado por el geógrafo y profesor de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria, Víctor Jiménez Barrado, a través de un mapa que muestra cómo la brecha de género también se manifiesta en la organización urbana.

Una mujer por cada seis hombres

El investigador expone en su estudio que “cada vez que aparece una mujer, ya hay más de seis calles con nombre de hombre. Así es muy poco probable que dos calles con nombre de mujer se crucen, y cuando lo hacen, casi siempre son santas o vírgenes”.

Si se observan las vías de mayor relevancia en la capital, de las 24 avenidas de la ciudad, solo una lleva nombre de mujer, la Avenida de Santa Rita de Casia. Y en este caso, no se trata de una vía céntrica, ya que conecta el barrio de Jinámar con el Centro Comercial El Mirador, apunta el geógrafo. 

Vírgenes o santas

Cuando se produce una intersección de calles con nombre de mujer — que como habrá podido adivinar a lo largo del texto, es en muy pocas ocasiones —, en la mayoría de casos, los nombres son de santas o vírgenes. Por ejemplo, en Las Rehoyas se cruzan la Virgen de Guadalupe, la Virgen de Loreto y Santa Luisa de Marillac.

El mapa vislumbra un espacio donde al menos las mujeres que comparten espacio no le deben sus méritos a la religión, sino a su talento como escritoras. Las calles de Ladera Alta tienen nombres como el de Escritora Carmen Martín Gaite, Escritora María Teresa León o Escritora Merce Rodoreda. 

Un intento de compensar esta brecha se dio con la creación de la Avenida 8 de Marzo, en honor al Día Internacional de la Mujer. Sin embargo, esta vía tampoco se encuentra en una zona céntrica, sino junto al Centro Comercial Los Alisios, en Tamaraceite, lo que podría interpretarse como una coincidencia con cierto sesgo, señala el texto.

La situación de la mujer

Aunque las mujeres son mayoría en la población de la ciudad (51,7 %), su presencia en los nombres de las calles sigue siendo minoritaria, quedando relegadas a una representación testimonial. 

Jiménez Barrado enumera varios datos de las mujeres en la ciudad para mostrar una realidad más profunda, más allá de los nombres de las calles.  La tasa de ocupación femenina en Las Palmas de Gran Canaria (54,3 %) sigue siendo inferior a la de los hombres (59,1 %). Además, un mayor porcentaje de mujeres no supera una renta de 10.000 euros anuales (25,6 % frente a 23,5 % en el caso de los hombres), y el perfil más habitual de persona desahuciada en la ciudad es el de una mujer migrante en una familia monomarental.

El papel de la geografía

Como geógrafo, destaca que desde el área también se trabaja en la elaboración de informes de impacto de género en planes urbanísticos, el diseño de espacios públicos seguros e inclusivos, entre otros aspectos. 

La toponimia de Las Palmas de Gran Canaria, por tanto, no es solo una cuestión simbólica, sino una manifestación de cómo la historia y el reconocimiento social han dejado de lado a las mujeres. Un cambio en el callejero podría ser un primer paso para visibilizar y homenajear su papel en la construcción de la ciudad.