Carlos Alonso: Canarias debe defender en Europa un papel "catalizador" en las relaciones con África

Atlántico Hoy entrevista al candidato de Coalición Canaria para las elecciones europeas del 9 de junio

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Imagen de archivo del candidato de Coalición Canaria al Parlamento Europeo, Carlos Alonso./ Coalición Canaria
Imagen de archivo del candidato de Coalición Canaria al Parlamento Europeo, Carlos Alonso./ Coalición Canaria

El expresidente del Cabildo de Tenerife (2013-2019), Carlos Alonso, retoma la actividad política para encabezar la candidatura de Coalición Canaria (CC) a las elecciones europeas del 9 de junio. En la papeleta irá de número dos, por detrás del PNV, reeditando una alianza en la que también se encuentran  Pi-Proposta per les Illes Balears, Geroa Socialverdes de Nafarroa, y la Agrupación Atarrabia.

Pregunta: ¿Qué supone volver a la primera línea política?

Respuesta: Es un cambio importante. Estaba contento de vuelta en mi actividad profesional pero el partido me pidió que asumiera este reto que me parece atractivo porque entronca con mi background profesional y formativo. Llevo más de 10 años vinculado a asuntos europeos aquí en Canarias y también en Bruselas. Era un reto importante por lo que significan estas elecciones, son muy importantes y lo demostramos incorporando también a los presidentes de los cabildos de La Palma, Fuerteventura y Lanzarote.

Hay temas recurrentes al hablar sobre las relaciones con Europa. ¿Por dónde empezaría a trabajar?

De cara a estas elecciones estamos intentando abrir la agenda. Se tiende a pensar en los temas europeos que afectan a Canarias desde sectores muy concretos: agricultura, pesca, sector industrial, fondos europeos... pero la agenda europea se ha ampliado a cuestiones que son relevantes y afectan al día a día de todos. Es importante transmitir que las europeas no solo afectan a determinados sectores. Uno de los temas urgentes es el de la migración. Tiene difícil solución y por ello hay que establecer medidas más eficaces para al menos canalizar el problema. La Unión Europea (UE) tiene un papel muy importante para ayudar a la regiones como Canarias que, de facto, están absorbiendo la mayor parte de la problemática.

¿Qué propuestas concretas? Promover la celebración de una conferencia internacional en el Archipiélago para conocer las problemáticas y ayudar a canalizar el problema desde el origen. También que la Comisión Europea desarrolle un programa especial de formación desde Canarias que permita mejorar las cualificaciones de las personas jóvenes de los países emisores y así ayudar a su desarrollo.

En este sentido, en ocasiones parece, ante la inacción del gobierno de turno, que hay que acudir a Europa para que nos hagan caso...

La UE es un sistema bastante complejo de equilibrios, no solo ideológicos sino también territoriales y de representación. Cada institución juega un papel y el Parlamento Europeo viene siendo desde hace tiempo cada vez más relevante. Canarias ha jugado un papel importante en muchas etapas, con la oficina y con los servicios técnicos del Gobierno de Canarias en Europa, que se dedicaban a redactar las propuestas para la Comisión, formar técnicamente los dossieres para las conferencias para los presidentes de RUP... Hay todas unas estrategias que se han desarrollado para influir en temas europeos pero yo creo tenemos que debemos buscar una posición más fuerte teniendo representación directa en Estrasburgo.

¿Qué opina de su coalición con el PNV? ¿Cree que será posible alcanzar un eurodiputado pese a ir de número dos?

La circunscripción es nacional y tenemos que buscar la manera de incorporar votos de todo el territorio español y con el PNV compartimos una visión similar de cómo debe ser la UE.

Si tenemos un buen resultado en Canarias hay muchas posibilidades. No está garantizado, pero sí es muy fácil obtener el primero solo con los votos del PNV, y la suma del resto de votos, más los restos del conteo del PNV, nos puede dar ese ese segundo escaño. Pero depende mucho de los resultados que tengamos en Canarias.

A nivel nacional el PNV apoya la amnistía, algo a lo que CC se ha opuesto. Ante tanta polarización, ¿cree que el votante puede entender esta alianza como una contradicción?

Nosotros no apoyamos la amnistía porque no la veíamos razonable en el contexto constitucional actual. Eso no excluye que en otra serie de cuestiones colaboremos. Ojalá tuviéramos no un diputado sino los que tiene el PNV y pudiéramos marcar agenda canaria de una manera más rotunda. Nosotros tenemos que optimizar el voto que tenemos. Con Sánchez, el único que tenía posibilidad de gobernar, conseguimos un acuerdo similar al que obtuvimos con el PP anteriormente.

¿Qué medidas ve necesarias para paliar la subida de costes del transporte marítimo?

Compensar los costes por emisiones aumenta el precio del transporte y nosotros importamos y exportamos la mayor parte de nuestros productos a través del transporte marítimo. A diferencia de lo que ocurre con el transporte aéreo, que excluyó las conexiones dentro del territorio nacional, en el caso del marítimo no hubo esa opción y nosotros vamos a intentar pelearla. Es un tema que para nosotros no está cerrado, como tampoco el del transporte aéreo con otros orígenes que impactan en nuestro turismo. Vamos a buscar por lo menos periodos de transición para que se permita a la industria marítima adaptarse a esta reducción de emisiones.

¿Cómo mejorar las condiciones del sector pesquero?

Hay claramente una pérdida de capacidad productiva. Pedimos volver al sistema que existía de compensación de costes de comercialización a través de un instrumento que se llamaba el POSEI Pesca, que se incorporó en el fondo general y ahí se ha diluido. Queremos un reglamento específico para articular mejores la ayudas a los pesqueros.  Entendemos que hay una limitación para preservar las capacidades de los océanos, pero nuestra actividad pesquera es muy artesanal y por tanto no influye en su capacidad de regeneración. Es algo que tenemos que luchar técnicamente con informes, pero, sobre todo, políticamente para que la UE lo entienda.

También nos interesa mucho que Canarias participe como observador de los acuerdos comerciales de pesca que la Comisión Europea negocia con países de nuestro entorno como Marruecos, Mauritania o Senegal de forma que podamos tener capacidades también para obtener licencias y y posibilidades de pesca. Finalmente, aunque Canarias tiene excepciones en relación a la utilización de fondos para la mejora de la flota, como está muy vinculada a la capacidad de pesca, al final esas ayudas no se están utilizando y tenemos que buscar la fórmula de que se empleen mejor.

¿Cómo de importante es tener un lobby en Bruselas defendiendo determinados intereses?

El que mejor ha funcionado para Canarias es el lobby platanero, que supo articular respuestas usando distintos mecanismos: capacidad técnica para explicar bien la problemática; la especificidad, algo sumamente importante para una producción que representaba un volumen importante en el comercio internacional; y también saber buscar aliados como franceses y portugueses en un momento en el que la Unión era más pequeña y podíamos defender mejor este tipo de intereses. ¿Cómo debe ser un lobby ahora? Yo creo que esos mecanismos siguen en vigor. Quizás buscar aliados tiene más dificultad porque hoy la relevancia de las regiones ultraperiféricas (RUP) es menor, aunque compartimos problemática con otro tipo de regiones, menos pobladas, del norte de Europa.

Canarias ha trabajado muy bien con la Comisión pero necesita aumentar el trabajo con otras instituciones, en particular el Parlamento Europeo por la mayor relevancia que tiene. Y aprovechar que en los últimos años el Estado se ha abierto a que las comunidades autónomas también representen a España en el Consejo, lo que ha generado un impacto favorable para defender los asuntos canarios en algunos aspectos. Con todo, hay que trabajar muchísimo.

Durante su época como presidente tinerfeño intentó poner el foco en la posición de Canarias como plataforma tricontinental entre América, Europa y África. ¿Podría retomar esa idea?

Yo fui redactor de la estrategia de la Unión Europea en relación con las RUP (en 2006) que buscaba que aumentarán su nivel de influencia en su entorno cercano, con más presencia y más capacidad para intercambiar servicios, bienes y en definitiva una relación social y económica más potente con esos países. Eso que se llamaba la Gran Vecindad. Es algo que debemos seguir impulsando. En nuestro programa incorporamos el concepto de frontera ultraperiférica. Canarias es un activo que la UE debe utilizar más porque estamos cerca de países donde se puede tener una mayor influencia e influir en su desarrollo.

Debemos aumentar las posibilidades de intercambio de personas y explorar, por ejemplo, ayudas al desplazamiento de canarios a África para trabajar, formarse y ayudar a generar más intercambio, más relaciones económicas y potenciar la inversión de Canarias en África a través de mecanismos fiscales. Hay muchas medidas que se pueden poner en marcha, también en lo referente a determinados riesgos vinculados al cambio climático o a algunas enfermedades que antes se consideraban del continente africano y que se están extendiendo hacia el norte. Ahí tenemos una posición que es a la vez de riesgo y de conocimiento. Por todo ello Canarias debe defender en Europa un papel más activo y catalizador en las relaciones con África.

Por último, uno de los temas estrella de las últimas semanas, la adquisición de viviendas por parte de no residentes. Plantea usted que pueda haber algún tipo de gravamen en materia fiscal.

Es un elemento central de nuestra campaña. Hay que establecer medidas de naturaleza fiscal que graven la llegada de nuevos residentes, que de alguna manera compensaría los impactos que estos nuevos residentes generan en las islas tanto desde el punto de vista ambiental como de equipamientos necesarios para atender las nuevas demandas desde el punto de vista de la vivienda, la sanidad o la movilidad. Se habla mucho del turismo y el impacto del alquiler vacacional, pero a mí lo que más me preocupa es el incremento de la población. Canarias ha aumentado su población en 25 años en 570.000 habitantes. Este incremento si lo lleváramos a la población turística equivalente estaríamos hablando de 30 millones de turistas, el doble de los que ahora recibimos. Fuerteventura, en apenas 25 años, ha duplicado su población.

La normativa europea no impide que podamos imponer unas tasas que tienen que estar orientadas al impacto ambiental, siempre que se aplique sin discriminación por razón de nacionalidad. En la UE hay medidas fiscales que permiten atraer, y si se puede establecer un régimen fiscal que atraiga a nuevos residentes también se podrá impulsar medidas que desincentiven su llegada gravando los impuestos. El enfoque tiene que ver con que Canarias no está dentro del esquema de armonización fiscal, ni del IVA, ni de los Impuestos Especiales, estamos fuera de las directivas de aplicación comunitaria. La imposición personal tampoco está sujeta armonización de la UE, con lo cual podemos establecer estos tipos sin salirnos de la normativa. Para mí es la línea clara en la que hay que trabajar para moderar el crecimiento de la población. No se trata de impedir que venga la gente, sí de moderar su crecimiento.

Para terminar, ¿por qué debería el votante elegir la papeleta de CC para las elecciones europeas?

Nosotros no vamos a tener otro interés que defender a las Islas. Hay otros eurodiputados que se van a tener que plegar a otros intereses de partido o que no respondan a los intereses de Canarias, como ocurre con otras representaciones a nivel estatal. Ese es nuestro principal valor, además que ya no estamos en ese eje polarizante que hay ahora de izquierda a derecha, sino que nuestro eje de defensa es el territorio de Canarias. Es el compromiso fundamental que ha dado réditos a lo largo de la historia cuando hemos tenido eurodiputados presencia en Bruselas se han buscado siempre mejoras para Canarias y se han conseguido.

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