La portavoz del Grupo municipal Popular, Jimena Delgado-Taramona, ha señalado en un comunicado que “la alcaldesa socialista Carolina Darias vuelve, una vez más, a abandonar y a ningunear al barrio de La Isleta y a sus vecinos al rechazar un Plan de Reactivación Cultural y Comercial presentado por el PP, que es el único partido que ha planteado soluciones a la situación del barrio.”
Lo que pasó ayer en el último Pleno del año, en el que “la alcaldesa progresista boicoteó la intervención de un vecino de La Isleta, que pretendía poner sobre la mesa la situación real que sufre el barrio, es de vergüenza.”
Por La Isleta
El Grupo municipal popular presentó una moción para que el Gobierno apoyara, impulsara y pusiera en valor las virtudes de La Isleta y “ha perdido una vez más una oportunidad para ello. Ayer nos encontramos con uno de los plenos más tensos del año, en que no solo se votó en contra de impulsar el barrio sino que se coartó la libertad de expresión de un ciudadano que sabe de primera mano, los problemas que tiene el barrio, puesto que toda su familia es de La Isleta, sus abuelos son de La Isleta, sus hijos son de La Isleta, y como él mismo recalca su vida es La Isleta.”, dijo Delgado.
Parala portavoz del PP está claro que “La Isleta languidece porque se siente el trastero de la ciudad, en palabras de los propios vecinos, y abandonada por un Grupo de Gobierno que les ha hecho muchas promesas y ninguna se ha cumplido.”
Promesas
En este sentido, Delgado-Taramona ha recordado que “se les prometió recuperar el Canarias 50 como zona deportiva, social, cultural y lúdica para el uso y disfrute de los vecinos del barrio y se han encontrado con que se destinará a un centro permanente de acogida de inmigrantes, algo que ya resaltamos en el Pleno del pasado mes de septiembre.”
“A Carolina Darias y sus socios de Gobierno parece no importales los vecinos de este emblématico barrio de la capital grancanaria ya que los propios residentes claman a gritos que está muy perjudicado. Sufre graves problemas de tráfico agravados por las obras de la MetroGuagua, y que lo estarán mucho más cuando éstas finalicen. Hay más de 424 locales y 248 viviendas cerradas, 100 solares en estado precario, y un 30% de su población mayor de sesenta años. Ha dejado de ser un barrio atractivo para los más jóvenes y para los emprendedores”.
“No podemos permitir que La Isleta sea un barrio poco atrayente, un barrio que fue el pulmón económico y cultural de Las Palmas de Gran Canaria. Este era el momento perfecto para devolver a La Isleta lo mucho que ha dado a esta ciudad y el Grupo de Gobierno ha vuelto a perder la oportunidad.”