El consejero de Transición Ecológica y Energía, Mariano Hernández Zapata, ha planteado este martes en el Parlamento la creación de una red canaria de refugios climáticos para proteger a la población más vulnerable frente a episodios de calor creciente. La iniciativa pretende ampliar la infraestructura verde del archipiélago con espacios públicos que ofrezcan sombra, acceso a hidratación y condiciones de confort durante las olas de calor.
Zapata ha explicado que el Gobierno dispone de una estrategia específica para desplegar estas zonas y que esta contempla criterios homogéneos para los municipios, como aumentar el arbolado urbano, reservar más superficie verde por habitante y adaptar los entornos urbanos para hacerlos más habitables en un clima más cálido.
Según el consejero, varios proyectos que ya funcionan en diferentes islas encajan en este modelo: parques sostenibles, áreas restauradas para recuperar funciones ambientales y zonas verdes que actúan como sumideros de carbono. Entre las actuaciones citadas figuran intervenciones en Guía de Isora, San Bartolomé de Tirajana, Los Realejos y Tazacorte, además de la publicación de una guía técnica que orienta a los ayuntamientos sobre cómo diseñar y adaptar estos espacios.
Graves efectos
El diputado nacionalista José Javier Pérez Llamas, que ha llevado el asunto al Pleno, ha advertido de que el calor extremo ya está teniendo efectos graves en Canarias. Ha recordado que este verano han fallecido 41 personas por causas relacionadas con las altas temperaturas y ha cuestionado la eficacia de los “refugios tradicionales”, como acudir a la playa o a la montaña, en un contexto en el que el clima es cada vez más severo y muchas viviendas “no están preparadas para soportarlo”.
Pérez Llamas ha reclamado rapidez y consenso en estas políticas y ha alertado de que las proyecciones climáticas apuntan a que islas como La Palma podrían registrar aumentos de entre 2 y 4 grados entre 2040 y 2070. Por ello, considera imprescindible acelerar el despliegue de la futura red de refugios climáticos para reducir la desigualdad que ya está generando el calor.