El barranco del Bufadero es un enclave natural que nace en la dorsal de Anaga y desemboca en el muelle del este del puerto de Santa Cruz tras recorrer los caseríos de Los Catalanes, Valle Grande y el barrio de María Jiménez. Cuenta con una longitud de algo más de 7.600 metros que en su mayoría se encuentran bajo la protección de la figura del Parque Rural de Anaga.
El barranco recibe el nombre de Bufadero porque, cuando el oleaje penetraba violentamente en su desembocadura, el agua salía expedida con gran fuerza por un respiradero, dando lugar a espectaculares surtidores a la vez que producía un atronador bufido.
Orígenes
El mencionado bufadero desaparecería al construirse la carretera de San Andrés. La historia cuenta que en este lugar se firmó en 1464 la llamada Acta del Bufadero, entre el castellano Diego García de Herrera y los menceyes guanches.
Lo cierto es que este barranco forma parte no solo de la historia, sino también de los muchos atractivos de Anaga, por lo que requiere de más protección. Además, el Bufadero, junto al de Santos y otros seis más, están incluidos entre los ocho barrancos de Tenerife considerados de riesgo en caso de lluvias intensas.
Asociación juvenil
La implicación ciudadana en la conservación de los espacios naturales es fundamental, tanto en el cuidado como evitando el deterioro de los mismos por acciones poco incívicas, contra las que también luchan diferentes colectivos y asociaciones vecinales.
Una de estas iniciativas ciudadanas es la que pretende realizar la Asociación Juvenil Somos María Jiménez, una entidad sin ánimo de lucro nacida en abril de este mismo año y cuyo protagonismo juega un papel central en la nueva iniciativa de voluntariado ambiental que impulsan el distrito de Anaga de Santa Cruz y el Cabildo de Tenerife, a través de la Oficina de la Participación y el Voluntariado Ambientales (Opvam).
Responsabilidad y compromiso
Este colectivo juvenil ha tomado la responsabilidad de coordinar y movilizar a los jóvenes y vecinos de María Jiménez en la protección y mantenimiento del barranco del Bufadero, uno de los principales enclaves naturales del área.
Como protagonista del proyecto, la asociación canaliza la energía y el compromiso de la juventud local, organizando actividades de formación y trabajo en equipo orientadas a la conservación del entorno. Además, actúa como puente entre los jóvenes del barrio y las instituciones, favoreciendo el diálogo y la colaboración activa en la gestión de los recursos naturales y sociales.
Objetivos
Su labor también contribuye a reforzar el tejido social y comunitario, promoviendo valores de trabajo colectivo y respeto por el medio ambiente. Al incentivar la participación y la defensa de las tradiciones locales, la Asociación Juvenil Somos María Jiménez se consolida como referente en la dinamización social y ambiental del distrito.
Entre los objetivos que destacan en esta iniciativa figura el fomento de la participación activa de jóvenes y vecinos de María Jiménez en la conservación y protección del barranco del Bufadero, además de intentar consolidar un tejido social y ambiental en el distrito, reforzando la colaboración y la preservación de tradiciones locales.
Los jóvenes y demás ciudadanos que se integren en la iniciativa y se comprometan con las acciones de preservación del barranco del Bufadero recibirán formación a través de Opvam y de la oficina del Distrito Anaga sobre cómo mantener la conservación del barranco.
