El uso de petardos en estas fiestas es muy habitual en niños y en adultos que explotándolos vuelven a ser niños. Pero la precaución es crucial a la hora de realizar esta práctica, pues muchas veces puede no salir como esperaba. No encender petardos dentro de latas, botellas y otros elementos que puedan causar daños es uno de las medidas que el 1-1-2 aconseja esta Noche Vieja. También se aconseja evitar tirar los petardos cerca de otras personas y sobre todo, no explotarlos cerca de zonas donde haya riesgo de incendio.
A continuación, te explicamos algunos consejos para su uso adecuado.
Consejos para un correcto uso de los petardos:
- Comprar los petardos que se aconseja para cada franja de edad.
- Leer las indicaciones de uso del fabricante.
- Comprar en tiendas homologadas.
- Evitar llevar los petardos en los bolsillos.
- Explotar los petardos en zonas seguras donde se tenga la garantía de no afectar a otras personas.
- No usar petardos dentro de elementos como botellas o latas.
- No lanzar petardos a zonas privadas.
- Encenderlos siempre con la ayuda de la mecha.
- Si un petardo no explota esperar al menos 30 minutos para manipularlo. Depende de la potencia de este mojarlo para evitar que explote y provoque daños.
Los perros, los más perjudicados
El uso de petardos tiene una cara amarga para los perros, quiénes pueden sufrir ansiedad, ataques epilépticos, taquicardias e incluso la muerte por el estruendo. El miedo de los perros ante las explosiones de los petardos se debe a que son capaces de oír los sonidos hasta tres veces más fuerte que los humanos. Por ello, se aconseja a sus dueños que cierren las ventanas y persianas de sus casas, que pongan música alta, que usen elementos como orejeras y que elijan un lugar seguro de la casa para estar con su perro.
En este sentido, también se aconseja a quiénes este Fin de Año harán explotar petardos que eviten zonas urbanizadas y lugares donde sepan que viven perros.