El aérodromo militar de Lanzarote acogió la semana pasada una prueba del Predator-B, un dron del Ejército del Aire y del Espacio español que puede actuar en misiones de inteligencia, vigilancia y reconocimiento en la región africana del Sahel. El ensayo forma parte de las operaciones programadas para que el recinto ubicado en el municipio de San Bartolomé obtenga la certificación de la IOC (Initial Operational Capabilities) y pueda funcionar como base de despliegue del aparato.
Fabricado por la compañía General Atomics Aeronautical Systems y utilizado por el ejército estadounidense durante la segunda guerra de Irak, los Predator-B del Ejército del Aire tienen como centro de operaciones la base aérea de Talavera la Real (Badajoz) –sede del Ala 23–. Su despliegue en Lanzarote tiene como objetivo utilizar estos drones en operaciones de inteligencia en el norte del continente africano.
27 horas de autonomía
Los Predator-B tienen autonomía para volar durante 27 horas, por lo que desde su adquisición Defensa planeó la posibilidad que estas aeronaves pudieran operar desde Lanzarote para operaciones de vigilancia e inteligencia en África. En el ensayo, que se realizó durante un periodo de tráfico elevado de aviones civiles para coordinar el trabajo con el Aeropuerto César Manrique, estuvo presente el jefe del Mando Aéreo de Canarias (MACAN), general de división Juan Pablo Sánchez de Lara.
La misión, según apunta el Ejército del Aire, se completó con éxito y culminó un trabajo que empezó el pasado mes de septiembre, con el envío del material desde Talavera la Real transportado a bordo de un Airbus Defence & Space (DS) A400M del Ala 31 –que tiene sede en la base aérea de Zaragoza–.
Ejercicio Sirio 22
Los Predator-B participarán, durante la segunda mitad de octubre, en el ejercicio Sirio 22, las mayores maniobras anuales de adiestramiento avanzado de las unidades operativas del Ejército del Aire. El Mando Aéreo de Combate (MACOM) las dirigirá desde su sede central, en la base de Torrejón (Madrid), aunque también desplazará personal para su control y evaluación a Gando (Gran Canaria), que será la principal base de despliegue de las unidades participantes, dotadas de aviones de combate EF-18M y Eurofighter, que se sumarán a los F/A-18 del Ala 46 basados en la isla.