El médico tinerfeño al que invitaron a dejar su piso, abrumado por el apoyo social

Los hechos sucedieron cuando a la vuelta de una guardia se encontró con un cartel anónimo en el que un vecino le agradecía sus servicios, pero le invitaba a abandonar la vivienda

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Hace unos días, las redes sociales hicieron viral la muy desafortunada reacción de algún vecino de un sanitario. Hablamos de Jesús, el médico tinerfeño residente en Alcázar de San Juan (Ciudad Real) que "fue invitado" por un vecino de su comunidad a buscar otro alojamiento por miedo al coronavirus y que afirma que se ha sentido muy arropado por el apoyo social tras conocerse el caso por las redes sociales.

Los hechos sucedieron el pasado sábado, cuando a la vuelta de una guardia se encontró con un cartel anónimo en el que algún vecino le agradecía sus servicios, pero le invitaba a abandonar la vivienda y a buscar alojamiento alternativo ante el riesgo de que contagiase a niños y mayores que residen en esa comunidad.s

"Me lo tomé mal, pero sobre todo me sentí triste después de estar un mes partiéndome el lomo en el hospital", reconoce a Efe Jesús, que señala que lo comentó en su entorno y fue su madre la que decidió publicarlo en su perfil de Facebook.









Agrega que a partir, de ese momento, su caso se hizo viral y el respaldo ha sido masivo, con el ofrecimiento de nuevos alojamientos, comida o apoyo emocional.

La propia alcaldesa del municipio acudió al hospital en el que realiza la especialidad de Médico de Familia y le entregó a él una carga de agradecimiento al centro hospitalario por el esfuerzo realizado por los sanitarios durante esta pandemia que ha afectado considerablemente a ese municipio de Castilla-La Mancha.

El cartel que le invitaba a marcharse ha sido sustituido por otro que pone "Aquí vive un héroe", condición que tampoco se cree Jesús, que destaca que "la valentía y el coraje" de los sanitarios de su hospital en la lucha contra esta pandemia ha sido "espectacular".

Jesús señala que se siente muy feliz donde está, considera que el vecino que colgó el primer cartel lo hizo en un acto impulsivo, y asegura que de esta experiencia se queda con el comportamiento "genial y ejemplar" de la mayoría de la ciudadanía.