La Navidad es una de las épocas más intensas del año para el consumo… y también para los estafadores. Las compras online, los regalos de última hora y la sobrecarga de mensajes y promociones crean el escenario perfecto para que los fraudes se multipliquen. En Canarias, esta realidad no es ajena, y la Policía Nacional en Tenerife ha advertido de las estafas más habituales durante estas fechas.
Aunque muchas de ellas se repiten año tras año, algunas han evolucionado y se presentan ahora con métodos más sofisticados, lo que las hace más difíciles de detectar.
Compras y fraudes
Durante la Navidad se dispara el comercio electrónico, y con él aumentan las ciberestafas. Una de las más comunes es el phishing, un fraude que busca robar datos personales y bancarios a través de correos electrónicos, mensajes SMS (smishing), redes sociales, aplicaciones de mensajería o llamadas telefónicas (vishing).
Los delincuentes aprovechan el contexto navideño para enviar cupones falsos, sorteos inexistentes o premios sorpresa, simulando ser marcas conocidas o empresas de confianza.
Paquetes falsos
Una de las estafas más detectadas en las últimas campañas es el phishing de paquetería. La víctima recibe un SMS o WhatsApp de una supuesta empresa de mensajería informando de que su paquete no ha podido entregarse.
El mensaje incluye un enlace que dirige a una web clonada, donde se solicita un pequeño pago por “tasas” o “aduanas”. Al introducir los datos, los estafadores obtienen la información de la tarjeta bancaria.
Tiendas falsas
También han proliferado las falsas tiendas online, que imitan la imagen de grandes marcas y ofrecen descuentos imposibles, incluso de hasta el 80%. La novedad este año es el uso de chatbots automáticos, capaces de responder de forma convincente y generar una falsa sensación de seguridad en el comprador.
Estas webs suelen desaparecer tras realizar el pago, dejando a la víctima sin producto y sin dinero.
Lotería Navidad
La Lotería de Navidad es otro de los grandes reclamos para el fraude. Entre las estafas más habituales se encuentran la venta de décimos falsos, la oferta de supuestos décimos “exclusivos” de administraciones famosas o los mensajes que anuncian premios inexistentes.
La Policía recuerda que los décimos deben comprarse solo en puntos autorizados, comprobando siempre que incluyan el logo oficial, el código, el sello de la entidad expendedora y que indiquen claramente si se trata de un fraccionamiento autorizado.
Participaciones falsas
En estas fechas también es común la venta de participaciones de lotería falsas, supuestamente vinculadas a asociaciones vecinales, clubes deportivos o colectivos solidarios que en realidad no existen.
El riesgo es claro: se paga por una participación que nunca ha sido depositada en una administración de lotería y que, por tanto, no tiene validez alguna.
Falsas donaciones
Aprovechando la solidaridad navideña, aparecen individuos en zonas comerciales que solicitan firmas y donativos en efectivo con logotipos falsos de ONG o asociaciones de ayuda a personas con discapacidad.
Mientras la víctima firma o busca el dinero, un segundo cómplice puede observar dónde guarda la cartera o aprovechar el descuido para cometer un hurto. La Policía recuerda que las ONG legítimas no suelen pedir dinero en efectivo en la calle de forma improvisada.
Tarjetas regalo
Las tarjetas regalo también se han convertido en objetivo de los estafadores. Se venden tarjetas falsas o robadas a precios atractivos, o se ofrecen como premios en sorteos fraudulentos. Al intentar usarlas, la víctima descubre que no tienen saldo o han sido bloqueadas.
Hurtos en compras
El conocido como “hurto cariñoso” o “amoroso” se intensifica en Navidad debido a las aglomeraciones. Una persona se acerca con una excusa, muestra afecto fingido —un abrazo o contacto cercano— y aprovecha para sustraer relojes, cadenas o carteras con gran habilidad.
El tocomocho
Aunque es una estafa clásica, el tocomocho sigue vigente. Consiste en convencer a la víctima de que compre un décimo supuestamente premiado, mostrando listas falsas y alegando que no pueden cobrarlo por algún motivo. El dinero se entrega… pero el décimo nunca ha sido premiado.
Perfiles vulnerables
Según la Policía, cualquiera puede caer en una estafa, independientemente de su edad o nivel social. No obstante, las personas mayores suelen ser más vulnerables por su menor familiaridad con la tecnología y las compras online.
Además, las prisas, la publicidad constante y los regalos de última hora hacen que, en general, se preste menos atención a enlaces, vendedores o mensajes sospechosos.
Consejos clave
La Policía Nacional recomienda priorizar webs oficiales, comprobar siempre la URL, desconfiar de ofertas demasiado buenas y no pinchar enlaces recibidos por mensajes no solicitados. También aconseja usar métodos de pago seguros, evitar redes Wi-Fi públicas para compras y no compartir datos confidenciales bajo ningún concepto.
En caso de sospecha o de haber sido víctima de una estafa, es fundamental actuar con rapidez, contactar con el banco y denunciar los hechos ante las fuerzas de seguridad.