"Hay que hacer ejercicio físico y psicológico porque los que no se mueven, se mueren"

AVÍVAte es una asociación sin ánimo de lucro que nace para apoyar a pacientes oncológicos y a sus familiares en Canarias a través de promover el ejercicio físico y mental como método para mejorar la calidad de vida de todos sus usuarios. Este colectivo se compone de supervivientes del cáncer y de familiares por lo que "la sensibilización está en nosotros y, por eso, confiamos firmemente en el éxito de nuestra organización", aseguran.

Proponen un programa inicial que cuenta con entrenamientos de fuerza adaptados a las necesidades de los pacientes, clases de yoga, danzaterapia y teatro. Además, para enriquecer la mente, organizan talleres culturales donde hay espacio para el cine, la lectura o conferencias de expertos del sector que complementen su compromiso con la salud física y mental de sus participantes. Actividades todas ellas que pretenden motivarles, ayudarles a mantenerse activos, adquirir hábitos de vida saludables y a mejorar, en definitiva, su calidad de vida. "Movernos contigo es nuestro lema", afirman desde la asociación.

Desde su estreno en redes sociales el 24 noviembre, su teléfono de atención al público no ha parado de sonar, lo que achacan a la gran necesidad de un espacio así que existía en Canarias. Con mucha empatía, dedicación y formación que ponen al servicio de este fin esperan conseguir aportar su grano de arena porque "todos estamos afectados por el cáncer, de manera directa o indirecta", afirman.

El vicepresidente y responsable del departamento de ejercicio físico, Alberto Simó y la monitora de la actividad de teatro y coordinadora del área de cultura y ocio, Ariadna Simó, explicaron al medio digital canario AtlánticoHoy sus objetivos, así como los obstáculos a los que se enfrentan y las experiencias vividas al frente de AVÍVAte.

Ariadna Simó junto a Alberto Simó | AH

Ariadna: "Surge de una necesidad de un espacio donde encontrar un punto afín a través del ejercicio físico, el ocio y las actividades culturales para unos pacientes con una necesidad determinada".

Alberto: "Hay una necesidad que es real. El cáncer produce mucha fatiga y malestar y queremos, a través del ejercicio físico, y de las actividades de ocio, como pueden ser risoterapia, teatro, yoga, pilates, etc., intentar contrarrestar todos esos efectos".

Alberto: "En todos los aspectos. Los tratamientos que se utilizan en esta enfermedad producen mucha fatiga y eso crea un círculo vicioso. Me quedo en casa porque estoy cansado, estoy cansado por la enfermedad y, a su vez, estás cansado porque te quedas en casa. Entonces, tanto a nivel psicológico como a nivel físico hay que hacer ejercicio porque los que no se mueven, se mueren. ¿Qué hay que hacer? Tratar psicológicamente y físicamente a todos los pacientes.

Ariadna: Con respecto a la parte que me toca a mí relacionada con la parte física y la recuperación de las habilidades sociales, siempre después de una enfermedad como es el cáncer, tanto si estás en pleno tratamiento como en fase de recuperación, llega un momento en que la mella psicológica está latente. Entonces, la recuperación de esa autoestima, de esas habilidades sociales, con respecto a las actividades de ocio, culturales y demás, de volver a enfrentarse a una vida que hay que afrontar después de esto, todo este tipo de actividades es esencial.

Entrevista a dos de los miembros de Avívate | AH

Ariadna: Por mi experiencia y el ámbito en el que yo me muevo el teatro, al final, termina despertando unos intereses que van más allá del inicio. Al final se crea una familia nueva. He tenido la experiencia ya, por otros grupos en los que he trabajado anteriormente, de crear un poco comunidad e ir al teatro, encontrar intereses y puntos en común y al final termina siendo todo más grande de lo que inicialmente era.

Alberto: Sí. Al final, esto se nota día a día. La persona, cuando empieza a hacer ejercicio, se ve cada vez mejor, con más ganas. Siente que se está fortaleciendo, que cada vez tiene más energía. Al final, lo que nosotros queremos es que las personas, al entrenar, en su día a día, consigan más energía. Es lo que se produce. Entonces, aparte de ver la evolución que va teniendo cada uno a medida que entrena, tenemos unas planillas que hemos diseñado para clasificar el nivel de fatiga que vayas superando.

Alberto: La mente hoy en día es casi todo. Está claro que el cuerpo te tiene que acompañar, pero, a nivel psicológico, lo que creas que puedes hacer, lo puedes hacer. Si tú crees que puedes luchar contra la enfermedad, lo vas a hacer, y vas a salir bien.

Ariadna: Creo que tiene mucho que ver con ese deterioro que uno va experimentando con toda la normalidad del mundo, que es la edad, pero que con la enfermedad se acelera y se palpa mucho más. Una actividad tan sencilla como subir unas escaleras, no la realizas igual cuando tienes 20 que cuando tienes 60, pero ahora notas ese acelerón a contratiempo, cuando no toca, cuando es producto de otra cosa. Es algo que tienes que superar a nivel físico, pero ¿qué es lo que se te queda en la cabeza cuando no puedes hacer algo porque tienes algo dentro que no debería estar? Entonces, la motivación física y mental están bastante equilibradas. Por eso siempre procuramos que la asociación abarque los dos ámbitos.

Ariadna: En mi caso, yo creo que destaca la normalización . Hay mucho estigma, mucho prejuicio en torno a un paciente de esta enfermedad y al final la visibilidad es lo importante para normalizarlo y para intentar, sobre todo, llevarlo al lado positivo.

Alberto: Necesitamos apoyo por todas partes. Estamos luchando por conseguir nuestros objetivos, pero si los hospitales no nos apoyan, porque al final son los primeros que nos tienen que apoyar porque son los que están en primera línea con los enfermos, tampoco podemos conseguir mucho. Los ayuntamientos y cabildos nos tienen que apoyar para prosperar. Si no, no estaremos haciendo nada.

"No deja de ser algo novedoso, que nunca sabes cómo va a funcionar hasta que efectivamente suena el teléfono y te dices: oye, pues hemos creado algo que nosotros considerábamos que era necesario, y había alguien en su casa esperando que esto abriera sus puertas"

Ariadna: Al final te lo esperas porque sabes que es algo que está a la orden del día. La necesidad sabes que está, pero lo que nos puede haber sorprendido un poco es el interés que ha suscitado. No deja de ser algo novedoso. Nunca sabes cómo va a funcionar hasta que efectivamente suena el teléfono y te dices: oye, pues hemos creado algo que nosotros ya considerábamos que era necesario, y que había alguien en su casa esperando para que abriera sus puertas. La parte de sorpresa fue un poco por ahí. Ver el interés que ha suscitado la asociación.

-Dan una importancia fundamental al fomento de la empatía y la confianza. ¿En qué aspectos pueden marcar una diferencia?

Alberto: Al final, las personas con la que trabajas se sienten mejor si tú los comprendes, sabes que lo están pasando mal, que pueden contar contigo. Al final, lo que consigues es que esa persona, cuando vaya a teatro, a yoga o a los entrenamientos, se sienta mejor y quiera ir. Ese es el objetivo: que la gente tenga ganas de hacer ejercicio, socializarse y mejorar su calidad de vida.

Ariadna: De una manera o de otra, lamentablemente, todos estamos afectados por el cáncer, de manera directa o indirecta. No es algo que deja indiferente ni sin marcar a nadie. Esa empatía de la que estábamos hablando al final es algo inevitable porque no puedes permanecer indiferente ante algo así, lo tengas de forma directa o indirecta.

Alberto: Esty entrenando a una chica que lo pasó mal por un cáncer de mama. Se puso en mis manos hace cerca de un  mes y medio y cada día me cuenta por WhatsApp cómo se encuentra, que no tiene ninguna molestia, que cada vez está mejor y va mejorando en los entrenamientos. Yo mismo, al entrenar, le muestro lo que hizo hace tres semanas y lo que hizo hoyy ella ve que está mejorando mucho. Cada vez tiene más movilidad en la zona donde la operaron. Al final, te quedas con que esa persona está ganando en calidad de vida y es lo que necesita.

Ariadna: Una persona que formaba parte de un grupo que yo tenía de pacientes oncológicos, que a día de hoy también está en la asociación y volvemos a trabajar juntas en teatro, estaba pasando por el tratamiento y no podía venir a veces a la actividad. Un día teníamos un gran estreno en el Auditorio, algo muy, muy a lo grande. No le noté nada cuando ella vino. Hizo su papel, lo disfrutó. Estábamos todos tremendamente orgullosos y me enteré esa misma noche de que acababa de salir del hospital porque la acababan de operar. No quiso decir nada porque sabía que yo le iba a decir que no lo hiciera, pero ella estaba tan ilusionada por el simple hecho de compartir el estreno con las compañeras que tuvo el impulso y la fuerza para estar recién salida del quirófano y, en vez de estar en casa reposando, disfrutar de la experiencia. Menos mal que no me lo dijo porque no la hubiera dejado.

 -Al menos 1/3 de todos los casos de cáncer pueden prevenirse. ¿Los hábitos de vida saludable pueden revertir esta tendencia?  ¿Cómo influyen los factores ambientales en la salud de la sociedad?
Alberto: Tenemos planeados talleres. El día 29 tenemos uno. Queremos llegar a la sociedad y hacerles saber que tienen que tener hábitos de vida saludable porque combinándolos con el ejercicio, descansando, que es súper importante, llevando una buena vida, se previene en un alto porcentaje los casos de cáncer. No hay una clave perfecta que te garantice que no vas a tener cáncer si haces eso, pues esto no existe en ningún tipo de enfermedad ni existirá, pero sí es verdad que si juntas varios montones de arena, al final tienes un gran montón de arena y consigues reducir esto en parte.

Ariadna: A la hora de liberarse completamente, nadie está exento de esto, pero, a la hora de trabajar sobre ello, facilita muchísimo más las cosas tener ese tipo de hábitos saludables, ese ejercicio constante, una buena alimentación.