Las infracciones administrativas por pesca furtiva bajan un 20% en la provincia de Las Palmas

La disminución se debe al aumento de la vigilancia y control de las costas por unidades terrestres, marítimas y aéreas de la Guardia Civil

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Imagen de pesca furtiva. / ARCHIVO GUARDIA CIVIL
Imagen de pesca furtiva. / ARCHIVO GUARDIA CIVIL

Las infracciones administrativas debido a la pesca furtiva bajan un 20% en la provincia de Las Palmas. La Guardia Civil ha comunicado este martes que la Comandancia de Las Palmas, a lo largo de 2023, disminuye las infracciones administrativas por pesca furtiva en la provincia ante el aumento de las vigilancias y control de las costas por unidades terrestres, marítimas y aéreas.

El comunicado detalla que la pesca en Canarias está vinculada a una actividad socio-económica que ha evolucionado desde la entrada en vigor de la Ley de Pesca de Canarias y su Reglamento, por lo que puntualiza que a partir de ese momento ''la reglamentación se ordenó de manera más exhaustiva y consecuente con la normativa de aplicación en el Estado y la UE''. 

En este sentido, desde la Guardia Civil recuerdan que trabajan de forma coordinada con otras administraciones ''para el control preventivo de la pesca ilegal y en materia de seguridad alimentaria enmarcadas en el cumplimiento de la legislación en materia de pesca Regional, Estatal y de la Unión Europea para el mantenimiento y conservación de los recursos marinos y la protección de los consumidores''. 

Furtivismo 

Desde la Guardia Civil apuntan que en la actualidad sigue existiendo pesca ilegal, por lo que participan en el control de la Pesca en el furtivismo principalmente de forma activa a través de todas sus Unidades, principalmente con las especialidades de Servicio Fiscal, Servicio Marítimo y SEPRONA. 

En este sentido puntualizan que detectan en la provincia dos grandes problemas relacionados con la pesca furtiva. ''Una de ellas son todas aquellas acciones que suponen un riesgo para la conservación de especies tanto las de interés pesquero, como aquellas especies protegidas como el Angelote y Guelde, requiriendo planes y estrategias de conservación y protección para así tener una pesca sostenible y por ello, las capturas deben respetar los cupos establecidos y las tallas/pesos mínimos según especie, asegurando con cierta solvencia la continuidad de los recursos pesqueros y su explotación controlada''.

Por otro lado señalan la falta de control ''que ponga en riesgo la salud de los consumidores, por la falta de trazabilidad con sus riesgos de intoxicación por capturas en lugares prohibidos y falta de medidas sanitarias en la cadena de conservación''. En cuanto a la pesca furtiva de especies concretas apuntan que ''pueden estar intoxicadas por ser capturadas en zonas con riesgo de contaminación y que entran en la circulación de pescaderías, restaurantes, bares y otros, ponen en grave riesgo al consumidor final, especialmente por consumo de moluscos y mariscos con biotoxinas, producidas por las algas, teniendo consecuencias graves como diarreica , amnésica, neurotóxica estas tres por moluscos y la ciguatérica (pescado)''. 

Objetivos

El comunicado insiste en que el objetivo de la Guardia Civil es evitar la pesca de exceso de cupos, captura sin tallas mínimas, la pesca en lugares prohibidos y ''evitar que el producto llegue al consumidor sin haber pasado el control de trazabilidad, sin cumplir con la cadena de frío, la venta ambulante, la conservación y manejo carentes de medidas higiénicas, consiguiendo con ello la protección de los recursos pesqueros, la conservación de especies y la prevención de la salud de los consumidores (en casos graves de intoxicación pueden suponer la muerte)'', concluye. 

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