Insiste, por tanto, en que "todavía hay muchas barreras sociales", lo que "tenemos, sin duda, que ir cambiando y derribando". Nada mejor, para ello, que demostrarlo con hechos. "Lo que tenemos que ver es que hay personas con diversidad funcional con unas características ideales para trabajos determinados, como pueden ser las labores repetitivas, características que pueden convertirles en excelentes empleados para puestos determinados, por eso hay que cambiar la mentalidad de la sociedad", subraya.
Esta asociación tiene como una de sus misiones más importantes es conseguir, a largo plazo, una mayor visibilidad y voz de los temas relacionados con el colectivo de trabajadores y de las empresas en que trabajan, tanto en las políticas que afectan a la integración de dicho colectivo en la sociedad como en el mercado de trabajo no protegido.
Un centro especial de empleo, a diferencia de una empresa ordinaria, cuenta con una subvención del gobierno del 50 % del salario mínimo interprofesional de la persona que contrata y no tiene que pagar seguro social "con lo que, teóricamente, tienes ciertas ventajas debido a que la empresa ordinaria no está contratando a gente con discapacidad. Quien está contratando a estas personas son los centros especiales de empleo", matiza.
Allí ofrecen "formación a esos trabajadores para que vayan al mercado no protegido". "Eso es en teoría", explica el experto, quien expone que "luego, en la practica, el mercado no protegido, la empresa ordinaria, no los contrata y, al final, están concentrados en los centros especiales de empleo". Moreno señala que lo ideal sería que las empresas ordinarias "contrataran a estas personas y no pusieran pegas, porque por unos prejuicios no se está haciendo".
Para luchar contra esta problemática, han organizado el que será el primer Congreso Canario de Centros Especiales de Empleo 'Creando empleo, Creando ilusiones', que tendrá lugar el próximo 17 de mayo en Santa Cruz de Tenerife y, al día siguiente, en Las Palmas de Gran Canaria.
En él tienen previsto crear junto al Gobierno de Canarias, concretamente con el Servicio Canario de Empleo (SCE), los protocolos para que la Administración "sea más ágil en algunos sentidos y no haya inconveniente para saber, por ejemplo, cuánto tiempo hay que dedicar, qué recursos y cual es la formación y temporalidad de la misma que debemos ofrecer al año dentro de una unidad de ajuste".
Mantiene que ese protocolo lo tienen que llevar a cabo conjuntamente porque "muchas veces el técnico del SCE no es psicólogo, mientras que yo sí lo soy, y puede que quien te esté dando el visto bueno sea una persona licenciada en Derecho y carezca de conocimientos en materia psicosocial". Por ello, solicitan crear mesas de negociación de cara a la elaboración de esos protocolos. "Se trata de un tema de comunicación", resume el experto, quien admite, por otro lado, que la consejera regional de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda, Cristina Valido, "se ha mostrado siempre muy receptiva". "La verdad es que, por parte del Gobierno de Canarias vemos interés político", reconoce. Sin embargo, para José Ramón Moreno, es evidente que "hay cosas que mejorar".
Los centros especiales de empleo son figuras creadas por la antigua Ley de Integración Social de los Minusválidos (actual LGD) para favorecer la inclusión laboral de las personas con discapacidad.
Su plantilla, a diferencia de otras empresas ordinarias, está formada como mínimo por un 70% de personas con algún tipo de discapacidad. Su objetivo es realizar un trabajo productivo participando regularmente en las operaciones de mercado y asegurar un empleo remunerado y la prestación de servicios de ajuste personal y social que requieren este tipo de trabajadores.
Es posible cumplir la Ley gracias a una serie de Medidas Alternativas vigentes en la actual Ley General de Discapacidad (previa solicitud de un Certificado de Excepcionalidad). La asociación ofrece los servicios de gestión y asesoramiento legal para el cumplimiento de la LGD a través de estas medidas:
- Contratar un trabajador autónomo con discapacidad o un Centro Especial de Empleo para el suministro de materias primas, maquinaria, bienes de equipo o cualquier otro tipo de bienes necesarios para el normal desarrollo de la actividad mercantil.
- Contratar un trabajador autónomo con discapacidad o un Centro Especial de Empleo para la prestación de servicios ajenos y accesorios a la actividad normal de la empresa.
- Realizar donaciones a entidades sin ánimo de lucro que tengan como objeto la integración social de personas con discapacidad.
- La constitución de un enclave laboral, previa suscripción de un contrato con un Centro Especial de Empleo.
- Uno de sus firmes propósitos es velar por los intereses de sus trabajadores y el desarrollo de las habilidades y actitudes que le permitan la incorporación de buenos hábitos de vida.
- Organizar, promover y desarrollar la formación de los trabajadores de las empresas asociadas, según los informes de ajuste personal y social, suscribiendo los acuerdos que fueran oporturnos en este sentido.
- Propiciar la consecución de la plena eficacia técnica, comercial y económica, y por tanto la mejora de la competitividad de los Centros Especiales de Empleo asociados, en los diferentes sectores donde desarrollen su actividad.