Pyongyang se ha ofrecido a clausurar de forma definitiva el centro en el que ha realizado sus seis pruebas atómicas después de ambos países se comprometieran a la "completa desnuclearización" de la península en la cumbre entre el presidente surcoreano, Moon Jae-in, y el líder norcoreano, Kim Jong-un.
Según ha explicado la oficina presidencial surcoreana, Kim le propuso a Moon en el marco de la cumbre que el cierre del centro de pruebas atómicas de Punggye-ri (noreste) se realice públicamente para subrayar el compromiso de Pyongyang con la desnuclearización.
Corea del Norte y Corea del Sur se comprometen a poner fin a la guerra oficialmente, 65 años después del cese de las hostilidades https://t.co/P6POmcRjkA pic.twitter.com/lu7OH0zz23
— CNN en Español (@CNNEE) 28 de abril de 2018
En ese sentido, el líder norcoreano dijo que invitaría a expertos y periodistas para presenciar la clausura del centro de pruebas atómicas.
Kim ya ha anunciado durante el pleno del Comité Central del Partido de los Trabajadores celebrado en Pyongyang el pasado 20 de abril la suspensión de sus pruebas nucleares y de misiles, así como el cierre de Punggye-ri, informó la agencia estatal KCNA
"Algunos dicen que estamos cerrando instalaciones que están inservibles, pero ya verás que están en muy buenas condiciones", le dijo el mariscal al presidente surcoreano, según su oficina.
Menos ganas de trabajar que el que hizo el muro que separa Corea del Norte de Corea del Sur. pic.twitter.com/6FYCLsBJJR
— Tuan (@____tuan) 28 de abril de 2018
Investigadores chinos han dicho incluso esta semana que parte de las galerías subterráneas de Punngye-ri se derrumbaron después del último test, lo que pondría en riesgo a varios países de la región debido a las emisiones radiactivas.
Los analistas han planteado dudas con respecto al compromiso de Corea del Norte, dada la falta de especificaciones en la declaración firmada el viernes con respecto a los mecanismos para implementar el mencionado desarme y ante los malos precedentes de la década pasada.
Líderes de Corea del Norte y Corea del Sur acuerdan poner fin a la guerra + Declaración conjunta completa #InterKoreanSummit https://t.co/4dPI6bi0Qv pic.twitter.com/lDiWIKCZiP
— Soompi Spanish (@SoompiSpanish) 27 de abril de 2018
Por otra parte, en la misma conversación que mantuvo con Moon el viernes, el líder norcoreano también ha asegurado que no es "el tipo de persona que dispara armas nucleares".
"Aunque tengo mis reservas hacia Washington, la gente verá que no soy el tipo de persona que dispara armas nucleares hacia Corea del Sur, el (Océano) Pacífico o Estados Unidos", le aseguró Kim a Moon.
Saludamos a hermanos Pdtes. de República Popular Democrática de Corea, Kim Jong-un, y de República de Corea, Moon Jae-in, por darse la mano en un diálogo histórico para poner fin a más de 60 años de confrontación. Desarme nuclear de la península es posible sin injerencia de EEUU. pic.twitter.com/UBvqWke0kK
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) 27 de abril de 2018
"Si nos reuniéramos regularmente con los estadounidenses para cimentar la confianza y ellos prometieran poner fin a la guerra y no invadirnos, ¿para qué mantendríamos entonces un arsenal nuclear y viviríamos en unas condiciones tan duras?", dijo en referencia a las duras sanciones que pesan sobre Pyongyang por su programa atómico.
Durante la histórica cumbre del pasado viernes, las dos líderes alcanzaron un compromiso para lograr la "desnuclearización total" de la península coreana y acordaron buscar un tratado de paz que ponga fin al enfrentamiento entre Corea del Norte con el Sur y EEUU a raíz de la Guerra de Corea, cerrada en 1953 con un alto el fuego pero no con un tratado de paz.
Kim tiene pendiente celebrar una cumbre con el presidente de EEUU, Donald Trump, a final de mayo o principio de junio para tratar también el fin de su programa armamentístico.
[LO ÚLTIMO] Corea del Norte anunció que desmantelará sus instalaciones nucleares en mayohttps://t.co/4zxqu1sqyG pic.twitter.com/VJNcyDM08M
— Infobae América (@InfobaeAmerica) 29 de abril de 2018
De celebrarse sería la primera vez que líderes de los dos países se ven las caras tras casi 70 años de confrontación iniciados con la Guerra de Corea (1950-1953) y de 25 años de negociaciones fallidas y tensiones a cuenta del programa atómico norcoreano.
Para acercar posturas para esa cumbre, la titular de Exteriores de Seúl, Kang Kyung-wha, y su homólogo de Washington, Mike Pompeo, mantuvieron una conversación por teléfono en la que la canciller detalló los resultados de la cumbre y subrayaron que la coordinación será crucial para esa cita.
Por otra parte, el propio Moon Jae-in ha conversado también por teléfono con el primer ministro nipón, Shinzo Abe, y se ha ofrecido a mediar para que Tokio y Pyongyang, que no mantienen lazos diplomáticos, puedan mejorar sus relaciones.
El principal escollo entre los dos países es el secuestro por parte del régimen hace décadas, y con el objetivo de impulsar sus programas de espionaje, de ciudadanos nipones, cuya repatriación exige el Gobierno japonés.