La Consejería de Sanidad ha lanzado este martes un llamamiento urgente a la población para revisar el estado vacunal contra el sarampión, especialmente en niños de 4 años y en personas nacidas después de 1978 que no tengan constancia de haber recibido las dos dosis de la vacuna o de haber pasado la enfermedad de forma natural.
El llamamiento se dirige de forma prioritaria al personal sanitario, ya que representa una parte importante de los casos en brotes registrados en España y otros países. La Consejería insiste en que este colectivo debe estar correctamente inmunizado debido a su mayor riesgo de exposición.
Rápida propagación
Sanidad ha recordado que el sarampión es altamente contagioso y se transmite por el aire. En los últimos años, se ha observado un alarmante repunte en países donde se consideraba erradicado, como Reino Unido, debido a la pérdida de confianza en las vacunas.
Si las coberturas vacunales descienden, la enfermedad puede reaparecer rápidamente, provocando brotes con hospitalizaciones y fallecimientos, incluso en países desarrollados. Un ejemplo reciente es el brote en Texas (EE.UU.), donde un niño no vacunado murió por complicaciones del sarampión, una enfermedad que puede prevenirse fácilmente con la vacuna.
Frenar los brotes
La Dirección General de Salud Pública del Servicio Canario de la Salud (SCS) ha insistido en la necesidad de recibir las dos dosis de la vacuna incluidas en el calendario vacunal. Esta inmunización no solo protege a la persona vacunada, sino que también evita la transmisión del virus a quienes, por razones médicas, no pueden recibir la vacuna.
Actualmente, el 95 % de la población canaria está correctamente vacunada en su primer año de vida, aunque la cobertura de la segunda dosis se sitúa en el 89 %.
La vacuna contra el sarampión, que forma parte de la triple vírica, se administra en dos dosis, a los 12 meses y a los 3 años. También se recomienda a adolescentes, jóvenes y adultos nacidos a partir de 1978 que no tengan documentación de haber recibido las dos dosis o de haber pasado la enfermedad.
Brotes activos
En España, la vacunación contra el sarampión se incluyó en el calendario infantil en 1975 y, desde 1981, se administra junto con la vacuna de la rubéola y las paperas (triple vírica). En 1996, la introducción de una segunda dosis mejoró la inmunidad y redujo drásticamente los brotes.
Gracias a estos avances, en 2017 la OMS declaró a España país libre de transmisión endémica de sarampión. Sin embargo, en los últimos meses se han notificado 142 casos en once comunidades autónomas y dos ciudades autónomas, todos vinculados a casos importados. Actualmente, hay ocho brotes activos bajo investigación.
Síntomas y complicaciones
El sarampión es una enfermedad febril exantemática, cuyos primeros síntomas incluyen fiebre, congestión nasal y tos. En algunos casos, aparecen pequeñas manchas rojizas con centro blanquecino en la mucosa oral.
El exantema suele manifestarse entre el tercer y séptimo día, comenzando en la cara y extendiéndose por el cuerpo. Aunque generalmente es benigno, puede derivar en complicaciones graves como neumonía, otitis, laringotraqueitis y diarrea. En casos excepcionales, puede causar encefalitis o incluso la muerte, especialmente en la infancia.
Ante la reaparición de la enfermedad en varios países, la Consejería de Sanidad insiste en la importancia de la vacunación para proteger a la población y evitar nuevos brotes en Canarias.