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Trabajadores precintando áreas recreativas. / CABILDO DE TENERIFE

Sin chuletadas por el calor: cómo proteger las áreas recreativas cuando se puedan usar

Las chuletadas o asaderos en las áreas recreativas siguen siendo uno de los planes favoritos de los canarios para este verano, lo que supone un riesgo para los montes si no se hace un uso responsable

Canarias se mete de lleno de unas jornadas marcadas por las altas temperaturas. En las Islas la alerta naranja se focaliza en Gran Canaria y se han activado avisos amarillos en La Palma, La Gomera, El Hierro y Tenerife. Una situación que ha obligado a las instituciones a tomar medidas, como cerrar las aéreas recreativas y prohibir hacer fuego.

Puede que no lo parezca, pero las chuletadas o asaderos en las áreas recreativas siguen siendo uno de los planes favoritos de los canarios para este verano. Cabildos como el de Tenerife, Gran Canaria o La Gomera han anunciado la prohibición de hacer fuego en zonas de acampada o áreas recreativas ante las altas temperaturas. Cuando pase la alerta, y no solo en verano, quienes acudan a los montes deben estar "al loro" y seguir una serie de recomendaciones para evitar que se produzca un incendio. 

Una zona recreativa precintada para que no se hagan chuletadas./ ARCHIVO

¿Qué se puede hacer?

Para cuidar las áreas recreativas en los montes de Canarias, el educador ambiental José Carlos Herrero puntualiza varios pasos a seguir. Principalmente la recogida de residuos y separarlos correctamente, incluso los pequeños o restos de comida, ya que estos últimos podrían afectar a la fauna y a su conducta alimentaria normal. Unos residuos que también podrían ser causante de incendios. 

Por ello Herrero hace hincapié en realizar un uso responsable del fuego, respetar los horarios de las áreas recreativas, estar pendiente a las indicaciones de los cabildos y bajo ningún concepto encender fuego fuera de las áreas indicadas. Además de recoger los residuos, otra cuestión importante es no arrojar colillas ni ningún tipo de material que pueda ser inflamable en el monte. En miradores como Chipeque ya ha sido polémica la cantidad de colillas que se arrojan. 

También destaca la importancia de cuidar el agua, y más en la actual época de estrés hídrico, así como de la movilidad responsable en la zona insistiendo en la necesidad de que los coches se estacionen de forma correcta, sobre todo para que los medios puedan acceder con facilidad a la zona cuando hay un incendio o un conato.