Este viernes, el Cabildo de Tenerife ratificará la entrada en vigor del denominado “céntimo forestal”, un gravamen de un céntimo por litro de combustible que se aplicará con el objetivo de aumentar la recaudación destinada a la protección forestal. Es una medida que, aunque recibe el respaldo del ámbito medioambiental, se ha topado con el rechazo de varios ayuntamientos de la isla.
Durante el periodo de alegaciones, al menos tres consistorios presentaron documentación en contra de la aplicación de este nuevo tributo: La Matanza, La Victoria y Santiago del Teide. Los dos primeros están gobernados actualmente por el PSOE, mientras que Santiago del Teide está en manos del PP, partido que cogobierna el Cabildo de Tenerife con Coalición Canaria (CC).
Esta circunstancia ha sido aprovechada por el PSOE para denunciar la inminente aprobación del tributo, pese al rechazo de las alegaciones, “incluido algún ayuntamiento gobernado por el propio PP, como Santiago del Teide, que ha advertido del impacto negativo de este nuevo impuesto sobre la economía insular”. El Ayuntamiento de Vilaflor (PSOE) también se ha mostrado contrario a la ampliación del impuesto, según consta en una moción presentada en el Parlamento de Canarias.
Los argumentos
Desde La Matanza reprocharon en sus alegaciones que la medida supone “un nuevo castigo fiscal para las familias trabajadoras de Tenerife, que se verán obligadas a pagar más por llenar el depósito de sus vehículos en un contexto económico ya de por sí difícil”.
En este sentido, argumentan que la medida se adopta “sin haber resuelto los graves problemas de movilidad de la isla: el transporte público es insuficiente, muchas líneas están saturadas y miles de personas no pueden llegar a sus centros de trabajo, estudio o salud sin depender del vehículo privado”.
Apuesta por la ecotasa
Los socialistas rechazan la aplicación del céntimo forestal en Tenerife, aunque la defienden en Gran Canaria, y denuncian que se implante un impuesto que afectará directamente a los tinerfeños, mientras se rechaza la creación de un tributo sobre las pernoctaciones turísticas, “que pagarían los visitantes, como propone el PSOE de Tenerife para mejorar los servicios públicos y proteger el territorio”, señalan.
En sus alegaciones, el Ayuntamiento de La Matanza también criticó que la medida tenga un carácter meramente recaudatorio, cuando parte del presupuesto insular permanece sin ejecutar. “Solo en los dos primeros años de este mandato se han dejado sin ejecutar más de 365 millones de euros, incluidos más de 27 millones en políticas ambientales. Lo que falta no es dinero, sino capacidad de gestión y voluntad política para distribuir la carga de forma justa”, denuncian.