El pasado mes de mayo, el Cabildo de Tenerife anunció la puesta en funcionamiento de una nueva subestación del Instituto Tecnológico y de Energías Renovables de Tenerife (ITER) que buscaba dotar de “mayor estabilidad al sistema eléctrico insular”. De momento esta estabilidad no se ha producido debido a que ninguna empresa se ha interesado por hacer las obras que conectan la subestación a dos plantas solares del ITER.
La licitación de las obras para conectar las plantas productoras de energía con la subestación se hizo por 979.592 euros. Las obras consistían en llevar a cabo los trabajos de ingeniería (diseño, suministro, fabricación y montaje) para poner en marcha una línea de 66 kilovoltios que conecte dos plantas fotovoltaicas de 7 megavatios y 4 megavatios a la subestación recién puesta en marcha.
Necesidad de las obras
Tal y como recoge el pliego de condiciones la puesta en marcha de dicha subestación requiere de la ejecución de una línea eléctrica subterránea a 66 kilovoltios que la conecte a la red de transporte a través de una posición en la subestación Abona. De momento las dos plantas fotovoltaicas del ITER están conectadas provisionalmente en barras de 20 kilovoltios de la Subestación Polígono de Granadilla.
El punto definitivo en el que se van a conectar estas dos plantas del ITER es una posición en la subestación Abona 220/66 kV. Para llevar a cabo este traslado “resulta esencial” la construcción y la puesta de las obras licitadas que finalmente han quedado desiertas. Por tanto, como recogen los documentos, esta línea es “indispensable” para la puesta en servicio de la subestación recién construida.
Nueva licitación
La licitación finalizó en marzo, sin embargo, uno de los documentos recogía que un operador económico había solicitado la ampliación para la preparación y presentación de ofertas “por considerar escaso dicho periodo” ya que consideraban “complejo o dificultoso el análisis de toda la documentación vinculada a la ejecución de las obras, dada su diversidad, su volumen y el nivel de detalle técnico”.
De esta forma el plazo se amplió hasta el 21 de abril, pese a ello quedó desierta.Desde el Cabildo de Tenerife no han querido dar información a Atlántico Hoy acerca de si se volverán a licitar las obras.