Un billete de avión de ida y vuelta entre Tenerife Sur y Londres vale 45 euros para las fechas del 23 de diciembre al 8 de enero, plena Navidad. Intentar volar desde Tenerife a otras islas en las mismas fechas es mucho más caro, hasta cinco veces en los casos de Lanzarote y Fuerteventura, islas que superan los 210 euros antes del descuento de residente para los combinados de ida y vuelta.
Una rápida búsqueda en el comparador de vuelos eSky permite hacerse una idea de la situación desproporcionada. Los billetes de avión desde Tenerife Norte a cualquiera de las otras islas serán más caros esta Navidad que los vuelos a otros destinos peninsulares, como Madrid (70 euros ida y vuelta), Barcelona (97 euros ida y vuelta) y Valencia (120 euros ida y vuelta), y mucho más costosos incluso que viajar a la capital de Reino Unido o a Dublín (81 euros ida y vuelta).
Precios prefijados
La razón es que los precios de los vuelos interinsulares están prefijados en el Boletín Oficial del Estado previo pacto con las aerolíneas --Binter y Canaryfly--, mientras que los demás destinos fuera de Canarias, en los que compiten más compañías, se rigen por la oferta y la demanda, muy afectada por el número de residentes con descuento que vuelen en cada ruta en el caso de los viajes al resto de España.
El BOE del 1 de septiembre de 2022, última actualización de precios, fija las tarifas antes del descuento de residente de la siguiente manera:
- Tenerife Norte-Fuerteventura: 113 euros
- Tenerife Norte-Lanzarote: 118 euros
- Tenerife Norte-La Palma: 77 euros
- Tenerife Norte-El Hierro: 83 euros
- Tenerife Norte-La Gomera: 84 euros
- Tenerife Norte-Gran Canaria: 76 euros
Los costes esta Navidad
Regresando a la página de eSky, se puede comprobar que las tarifas que aparecen ofertadas para el periodo del 23 de diciembre al 8 de enero, ya sean de Binter, de Canaryfly o combinaciones, se ajustan bastante a la tabla de precios máximos. Siempre calculando con ida y vuelta y siguiendo el mismo orden expuesto en la anterior lista, volar a Fuerteventura vale esta navidad 219 euros; a Lanzarote asciende a 228; en el caso de La Palma, 165 euros; 162 si se trata de El Hierro; 160 a La Gomera; y 143 euros para ir a Gran Canaria.
A veces es más barato
Entonces, ¿por qué en otras fechas a veces cuesta más barato? Depende de la ocupación. En el BOE del 27 de julio de 2006, fecha en la que se establecieron por primera vez las tarifas máximas, se acordó: "Las compañías podrán solicitar a la Dirección General de Aviación Civil el establecimiento de tarifas flexibles siempre que el precio de la tarifa resultante no supere los porcentajes de la tarifa de referencia (...). En cualquier caso, el número de plazas ocupadas en cada vuelo con estas tarifas, no superará el 50 por ciento de las plazas ofertadas".
Es decir, que las aerolíneas pueden bajar los precios (nunca subirlos) en la mitad de sus plazas aéreas. Es el caso, por ejemplo, de los Bintazos de Binter. En periodos en los que hay mucha demanda, como por ejemplo Navidad, las plazas más baratas se acaban antes y, en los últimos días, sólo quedan los asientos al precio fijado por el BOE.
Una situación "inaceptable"
La situación es "inaceptable" para la asociación Canarios Sin Alas. Su vicepresidente, Miguel Díaz, expresa a Atlántico Hoy que "no hay una explicación técnica que justifique unos precios tan caros". Según Díaz, como sólo hay dos operadoras en este mercado, presionan para que haya una subida de precios al negociarlos con el Gobierno de España.
"Ni los aviones que vuelan entre islas son tan caros de mantener ni consumen tanto como los que vuelan a Gran Bretaña, ni el trayecto tiene la misma distancia y duración", dice, aludiendo a la enorme diferencia de precios que hay al comparar los vuelos desde Tenerife con destino a Londres (45 euros ida y vuelta) o a otras islas (hasta 228 euros ida y vuelta en el caso de Lanzarote).
Perversión del mercado
Para el vicepresidente de Canarios Sin Alas, la causa de estos precios prefijados por Servicio Público tan exageradamente caros en comparación con otros destinos es la perversión del mercado que ha provocado el descuento de residente.
Esta tesis es apoyada por el catedrático de economía de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria Ginés de Rus, que en el episodio Embarque al 75% del programa de RTVC Informe Trópico explicó que las aerolíneas tienden a subir los precios en los vuelos en los que esperan una mayoría de viajeros residentes en Canarias para que el precio final que estos pagan continúe siendo aceptable para el consumidor, pero ellas reciban en concepto de subvención el otro 75% del precio del billete.
Por eso, según De Rus, los vuelos en los que viajan pocos residentes o aquellos a los que no se les puede aplicar el descuento --como sería el caso del Tenerife-Londres-- tienen precios mucho más asequibles que los que pueden ser subvencionados.
Binter cumple con la norma
Fuentes de Binter --una de las dos aerolíneas que prestan estos servicios-- consultadas por Atlántico Hoy se desmarcan de la explicación que ofrece a este medio Miguel Díaz, el vicepresidente de Canarios Sin Alas, afirmando que "el transporte aéreo en Canarias está sujeto a las regulaciones del Ministerio de Fomento a través de las Obligaciones de Servicio Público (OSP)" y señalando que su aerolínea, como marca la ley, establece los precios máximos publicados en el BOE.
No obstante, como también recoge el BOE del 27 de julio de 2006, son las propias aerolíneas que operan en las rutas sometidas a obligaciones de servicio público las que proponen las subidas de precios cada año a la Dirección General de Aviación Civil. De ahí las suspicacias de la asociación Canarios Sin Alas cuando habla de "presiones" para subir los costes.