El grupo de animación de la UD Las Palmas, Ultra Naciente, en una imagen de archivo.
El grupo de animación de la UD Las Palmas, Ultra Naciente, en una imagen de archivo.

¿Por qué abandonó Ultra Naciente el Estadio de Gran Canaria?

El grupo de animación se marchó en el minuto 20 del partido frente al Eibar tras un control policial que califican de “arbitrario” y “excesivo”

Alberto Ley

El partido entre la UD Las Palmas y el SD Eibar, disputado este domingo en el Estadio de Gran Canaria, dejó una estampa inédita: la grada Naciente, habitualmente el corazón del ambiente del recinto, sin banderas, pancartas ni cánticos. El grupo de animación Ultra Naciente decidió abandonar el estadio en el minuto 20 como protesta por un control de alcoholemia aplicado por la Policía Nacional en los accesos, que varios aficionados consideran “injusto” y “fuera de lugar”.

Malestar por los controles

Según los testimonios difundidos por hinchas presentes en la zona, varios miembros de Ultra Naciente fueron sometidos a pruebas de alcoholemia antes de entrar al estadio. Uno de los aficionados relató que su amigo fue retenido durante media hora y se le impidió el acceso tras marcar 0,17 en el control, pese a no mostrar signos visibles de embriaguez.

El grupo asegura que los agentes no ofrecieron explicaciones ni permitieron presentar una hoja de reclamaciones, algo que consideran contrario a la normativa vigente. “Nos pareció surrealista que pudiéramos coger el coche, pero no entrar a animar”, escribió uno de los presentes en redes sociales.

Ante la situación, y en señal de protesta, los integrantes de Ultra Naciente decidieron no desplegar sus pancartas ni animar durante los primeros minutos del partido. Finalmente, abandonaron la grada en el minuto 20, dejando vacía la zona donde habitualmente se concentran.

El club guarda silencio

Hasta el momento, la UD Las Palmas no ha emitido ningún comunicado oficial sobre lo ocurrido, ni ha confirmado si el control fue ordenado por el propio club o formó parte de un dispositivo policial independiente. Tampoco la Policía Nacional ha ofrecido una versión pública.

En cambio, distintos medios especializados recogen que la grada Naciente apareció sin actividad durante todo el encuentro, una imagen inusual en el estadio amarillo, donde el grupo acostumbra a marcar el ritmo de los cánticos y la animación.

Graves disturbios

El incidente se produjo en una jornada ya tensa. Horas antes, se habían registrado enfrentamientos entre ultras del filial amarillo y del Club Alcalá, en los alrededores del Anexo del Estadio de Gran Canaria. La pelea, ocurrida en la calle Fondos de Segura, dejó varios heridos leves y daños materiales, y motivó un refuerzo de los controles policiales de cara al partido frente al Eibar.

Fuentes policiales consultadas por medios locales vinculan ese episodio con la mayor vigilancia en la grada de animación, aunque no se ha precisado qué criterios se aplicaron para realizar las pruebas de alcoholemia o qué protocolo se activó.

Reacciones y descontento

La marcha de Ultra Naciente ha generado una oleada de reacciones en redes sociales entre los aficionados amarillos. Muchos reprochan la falta de comunicación entre el club y su principal grupo de animación, y piden que se aclaren las circunstancias para evitar un conflicto mayor.

“El ambiente del estadio se vino abajo. Sin ellos no es lo mismo”, comentaban varios abonados tras el encuentro, que terminó con victoria por 3-1 ante el conjunto armero.