El CB Canarias rompe la maldición blanca ante un Santiago Martín lleno

El CB Canarias vence por 72-59 al Real Madrid después de un último cuarto espectacular que levantó del asiento a los 5.133 espectadores que llenaron el Santiago Martín

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Bruno Fitipaldo, MVP del partido, disputa el balón a Causeur en la victoria del CB Canarias por 72-59 ante el Real Madrid./ Efe
Bruno Fitipaldo, MVP del partido, disputa el balón a Causeur en la victoria del CB Canarias por 72-59 ante el Real Madrid./ Efe

El CB Canarias ganó 72-59 al Real Madrid en el Pabellón Santiago Martín con un parcial de 31-16 en el último cuarto que decantó el encuentro del lado aurinegro. Espoleado por más de 5.000 aficionados, el cuadro lagunero rompió la maldición de quince derrotas consecutivas contra el Real Madrid en un partido en el que Bruno Fitipaldo lideró la remontada con 14 puntos y nueve asistencias.

Después de un minuto de silencio en memoria de Javier Imbroda, el balón se puso en juego en el Santiago Martín. Wiltjer abrió el marcador con un triple pero Llul replicó enseguida, muy activo en el primer cuarto. Al intercambio desde el tiro lejano también se apuntaron Doornekamp y Todorovic, que igualaron a poco de finalizar los primeros diez minutos. Aún así, la salida a pista de Heurtel, que anotó cinco puntos consecutivos, puso en ventaja a los blancos al final del primer acto,14-18.

El segundo cuarto comenzó con una pérdida de Fitipaldo y la consecuente canasta regalada a Causeur. El base uruguayo se empeñó en enmendar su error y comenzó a repartir asistencias a los hombres altos, invitando a Fran Guerra o a Shermadini a hundir el aro, aunque también sumó en su cuenta anotadora personal después de una arrancada con potencia que culminó a tablero. Desde el perímetro aurinegro, de nuevo anotaron Todorovic y Wiltjer, sospechosos habituales en la larga distancia. Por parte del Madrid, Causeur lideró la anotación mientras que el gigante Tavares aprovechó su altura para machacar y responder a los puntos de los pivots del Canarias. Al descanso, ligera ventaja para los blancos, con 28-32.

Abre la muralla

En la reanudación, Tavares puso sus 2,21 metros al servicio de la defensa blanca. El ataque aurinegro parecía una empresa condenada al tapón del pívot caboverdiano. Guerra, Marcelinho, Wiltjer y Shermadini se chocaron contra la muralla en una sucesión de seis tapones que anularon la puntuación del cuadro lagunero. Mientras, los blancos seguían sumando y alcanzaron una ventaja de doce puntos, principalmente por medio de Yabusele, que arrebató el protagonismo a un Causeur fatigado por la carga de minutos. La brecha parecía amplia hasta que Salin anotó un triple, seguido de seis puntos consecutivos de Sulejmanovic que devolvieron el oxígeno al Canarias antes de un último cuarto al que se llegó con 41-43.

En el último acto, el Canarias le dio pronto la vuelta al marcador. Marcelinho, al que Vidorreta reservó durante gran parte del partido, ejecutó una entrada a canasta con finta y Salin puso la guinda desde el perímetro. Lull reaccionó con otro triple pero la conexión Marcelinho-Shermadini se activó por primera vez en el partido y regaló un alley-oop para el aplauso del público. Con empate a 50 en el marcador, Sastre anotó a tablero después de una entrada a canasta, con finta a mitad de carrera, que excitó aún más a la grada.

Fitipaldo, lo mejor para el final

En ese momento Fitipaldo sacó la artillería con dos triples consecutivos, más otro de Salin que pusieron ventaja de 12 puntos a favor del Canarias. Llul mostró su impotencia con una patada al balón y Fitipaldo anotó el tiro libre resultante de la falta técnica. En la siguiente jugada, además, el uruguayo asistió a Fran Guerra para que machacara y ampliara la ventaja. El Madrid necesitaba sumar de tres y Yabusele lo consiguió pero Fitipaldo estaba pleno de confianza y le dio la réplica para mantener la distancia de quince puntos en el marcador, con un 70-55. Antes de sentarse sirvió de nuevo una asistencia para Guerra, que cerró la cuenta anotadora del Canarias. Yabusele volvió a convertir de tres pero los 5.133 espectadores del Santiago Martín ya celebraban la victoria, que finalmente se consumó con un marcador de 72-59.

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