El CD Tenerife llega a Octavos en Copa: las otras 13 ocasiones en las que llegó tan lejos

El equipo blanquiazul ya se enfrentó en la misma ronda contra el representativo balear en la temporada 2000/2001, cayendo en ambos partido por dos goles a cero

Guardar

Gol de Luismi Cruz en el partido del CD Tenerife contra la UD Las Palmas en la Copa del Rey./
Gol de Luismi Cruz en el partido del CD Tenerife contra la UD Las Palmas en la Copa del Rey./

Los Reyes Magos trajeron al Club Deportivo Tenerife una postrera ilusión venciendo este domingo a la Unión Deportiva Las Palmas en los dieciseisavos de final de la Copa del Rey.

Los goles de Amo y Luismi Cruz clasificaron al representativo isleño a una eliminatoria en la que se enfrentarán al Mallorca, uno de los preferidos de una afición ilusionada con un pase a cuartos que no consiguen los blanquiazules desde la temporada 1995/96 contra el Atlético de Madrid, hace casi 30 años.

No debería estarlo si atendemos a la única ocasión en la que ambos conjuntos se enfrentaron en esta ronda, en la temporada 2000/01, cuando el equipo balear ganó ambos encuentros por dos goles a cero. Era la época de Rafa Benítez en el banquillo y emblemas tinerfeñistas en el campo como Pier o Huguito Morales.

La magia del 94

Con el pase frente al eterno rival el Tete alcanza su decimocuarta participación en la Copa del Rey, si bien son diez con esa denominación, a partir de la 77/78.

Antes de aquello hubo una década notable, la de los 60, en la que el equipo supo por primera vez lo que era competir contra los mejores, y tres rondas de octavos así lo demuestran. En dos de ellas se pasó de ronda pero Atlético y Sevilla impusieron su ley.

En tan solo cinco ocasiones llegó hasta los cuartos de final y solo una vez, en una inolvidable serie de los blanquiazules, se plantó en las semifinales contra el Celta de Vigo de Gudelj, Cañizares y Engonga, quienes fueron claramente superiores en el partido de ida y se llevaron la eliminatoria.

Justo antes de eso, liderados en aquellos partidos por Felipe Miñambres y un inconmensurable Diego Latorre, el Tenerife venció al Real Madrid en cuartos de final por cero goles a tres en una de las grandes citas de aquel mítico equipo de los noventa.

La irrelevancia

Tras los éxitos conseguidos a finales del pasado siglo el Tenerife cayó en la irrelevancia, justo después de perder contra el Mallorca en 2001. Diecinueve años pasaron hasta que se plantó de nuevo en unos octavos, ya a partido único.

Fue contra el Athletic Club de Bilbao, al que se le planteó un gran partido y mucho sufrió durante el tiempo reglamentario. Pero el 2-2 con el que se llegó al fin de la prórroga fue suficiente para que la mayor experiencia de los vascos les hiciera llevarse el triunfo a casa por 2-4 en la tanda de penaltis.

Solo un momento si acaso relevante de la Copa entre medias, cuando en dieciseisavos llegó el Madrid con Hernán Solari en plan estrella y metió dos goles de falta para que su equipo ganara 0-3. Un Solari que creció futbolísticamente en Tenerife mientras su padre entrenaba a los blanquiazules. Cosas del destino.

Ahora, a medio camino de una temporada que tendía a más irrelevancia, la victoria de Reyes frente a Las Palmas, con el regusto mayor de saberlos en Primera, puede espolear al equipo y no solo retomar la senda del triunfo en liga sino, quizás, soñar con aquella noche madrileña en la que el pequeño argentino, con manga larga y guantes tupidos, dos goles mediante, hizo un último roto tinerfeño a Paco Buyo.

Archivado en: