La Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife ha desestimado el recurso contra el archivo de la causa por coacciones contra Rayco García, accionista y consejero del CD Tenerife, dando así por cerrado un caso que comenzó el pasado mes de febrero. El tribunal ha confirmado el sobreseimiento provisional dictado por el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 1 de la capital tinerfeña, que ya en su momento decretó la falta de indicios suficientes para continuar con el proceso judicial.

La resolución emitida por la sección quinta de la Audiencia es firme y declara de oficio las costas procesales de esta segunda instancia, lo que supone un respaldo total a la decisión judicial anterior.

Nunca prosperó

Rayco García fue detenido el pasado 12 de febrero por agentes de la Policía Nacional, y en los días posteriores prestó declaración hasta en tres ocasiones en el juzgado correspondiente, permaneciendo en calidad de investigado hasta que la titular decidiera si había elementos para seguir adelante con el caso. Finalmente, el juzgado decretó el archivo de la causa, avalado también por la Fiscalía, que ya había solicitado el sobreseimiento provisional al no encontrar indicios claros de delito.

El entorno de Rayco García interpretó la denuncia como un intento de perjudicar al accionista del CD Tenerife en el contexto de la junta general del club, dado que tanto el propio García como la familia de la denunciante son importantes accionistas de la entidad blanquiazul y mantienen posiciones enfrentadas en el ámbito societario.

Acciones legales

Tras conocerse la resolución judicial, la defensa de García ha confirmado que emprenderá acciones legales contra aquellos que han dañado su imagen durante este proceso. La representación procesal del empresario asegura que actuará frente a cualquier persona física o jurídica que haya "injuriado, calumniado, difamado o perjudicado" el honor de Rayco García durante el tiempo que ha durado la causa.

Con esta decisión judicial, Rayco García queda exonerado de las acusaciones, lo que supone un alivio para el entorno del accionista, quien ya había expresado su voluntad de defender su honor ante cualquier ataque público o privado. Desde el CD Tenerife, no ha habido pronunciamientos oficiales sobre el caso, aunque el propio García ha expresado en círculos cercanos su intención de seguir trabajando por el club y dejar atrás este episodio judicial.