Este martes el Clúster Audiovisual de Canarias ha organizado una jornada informativa con agentes del sector para resolver las dudas acerca de las nuevas ayudas para la creación audiovisual del Gobierno central. El sector podrá beneficiarse de más de 1.700 millones de euros que buscan profesionalizarlo a través del fomento de fondos de inversión, la capitalización de las empresas o la generación de deuda.
En el tour que están haciendo desde la empresa pública Sociedad Española de Transformación Tecnológica (SETT) por las comunidades autónomas, este martes ha tocado el turno a las empresas de la isla de Tenerife para explicar estas ayudas, que se suman a los beneficios que se ya tienen las empresas audiovisuales en Canarias gracias al Régimen Económico y Fiscal.
Las ayudas
En total se van a poner en marcha 1.712 millones de euros a nivel nacional para impulsar la profesionalización de las empresas audiovisuales en España. Esta cuantía se dividirá en 1.500 millones euros en fondos para producción audiovisual y 212 millones destinados a creaciones culturales, podcast, música y productos que fomenten las lenguas cooficiales.
En general, la ayuda va destinada a todo el universo audiovisual. Esto incluye la creación de películas, series de ficción, entretenimiento, cine publicitario, documentales, cultura digital, contenidos multimedia interactivos, juegos, esport, efectos visuales, Inteligencia Artificial, postproducción, streaming, metaverso. “Va mucho más allá de la cadena de valor”, ha explicado María Coronado, responsable de audiovisual en SETT España.

Fondos de inversión audiovisuales
Una de las herramientas a través de las cuales se distribuye la ayuda son los vehículos de inversión, es decir, aquellos fondos o sociedades de inversión, que son una figura que no está tan desarrollada en esta industria.
En este caso, la empresa pública podrá aportar un mínimo de 49% de la entrada frente a un 51% de inversión que tiene que ser completamente privada. “Confío en que de aquí a un año haya bastantes iniciativas que puedan fondearse”, ha apuntado la responsable de la empresa pública.
Capitalización de las empresas
Los otros dos instrumentos que se han puesto en marcha sí que benefician directamente a las empresas del sector. Por una parte, están las ayudas al capital, que no se dirigen tanto a los proyectos audiovisuales, sino más en el producto financiero. Por ello Coronado recomienda pensar más en la estrategia empresarial que en un proyecto concreto para beneficiarse de esta herramienta.
“Es una oportunidad de que cojáis ese músculo financiero, de que sean más fuertes, podáis diversificar”, ha apuntado la responsable. Esto ayudaría a las empresas a tener una mayor fuerza financiera, que se puede trasladar a la capacidad de negociar, a la compra de derechos de libros o la distribución de los proyectos (viajes).
“Cuanto más capitalizadas estén las empresas más fuertes vais a ser en el mercado”, ha destacado. En este caso, la empresa pública entraría como máximo en el 49% de la capitalización de la sociedad, con un plazo máximo de salida de 15 años, aunque no sería obligatorio.

La deuda
El segundo instrumento dirigido a las empresas es la deuda. Sobre las necesidades de las empresas, se puede aprobar una deuda del 70% por parte del Estado. Esta tendrá un plazo de ejecución de 10 años, con tres de carencia. Coronado ha señalado que esta herramienta tiene sentido para aquellas empresas que tengan que recurrir al endeudamiento, aunque ha apuntado que es “mucho más innovador” la herramienta del capital.
El mínimo para acceder a estas ayudas es de una inversión de 500.000 euros, esto significa que el segmento del sector más pequeño quedaría fuera de las ayudas. Estas ayudas están destinadas para empresas españoles o aquellas extranjeras que buscan establecerse en España.
Plazo
Todos estos fondos tienen como plazo máximo el 31 de agosto de 2026. Aquellos que no se hayan aprobado entonces se devolverán a Europa. Eso sí, ha avisado a las empresas que esa fecha es para las operaciones ya firmadas en notaría, es decir, que tienen que estar ya formalizadas.
Por ello apunta que las operaciones que no hayan entrado a finales del primer trimestre de 2026, “va a ser muy difícil que salgan”. En base a ello, ha pedido “madurar cuanto antes los proyectos” para que puedan estudiarse con tiempo desde la empresa pública.

