Las nuevas ayudas en viviendas contemplan la eficiencia energética y la domótica

El Instituto Canario de la Vivienda ha publicado esta semana la convocatoria para la mejora de la eficiencia energética y sostenibilidad para los hogares canarios, basadas en la conservación, mejora de seguridad y accesibilidad que se quieran realizar

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Fachada de un edificio de viviendas en La Cuesta. / Atlántico Hoy
Fachada de un edificio de viviendas en La Cuesta. / Atlántico Hoy

A favor de la igualdad y mejora en la vivienda, el Instituto Canario de la Vivienda ha publicado esta semana la convocatoria para la mejora de la eficiencia energética y sostenibilidad para los hogares canarios, basadas en la conservación, mejora de seguridad y accesibilidad que se quieran realizar. 

En la reducción de la huella de carbono que tanto Europa como Canarias exigen conseguir en pocos años, la rehabilitación de las viviendas y edificios es un aspecto fundamental que queda en un segundo plano frente a los grandes proyectos en sostenibilidad. Los hogares también cuentan con una alta carga medioambiental, por lo que su mejora en eficiencia, pero también en accesibilidad o en seguridad, son claves en el camino hacia un parque de viviendas respetuoso con la sociedad y el ecosistema. 

Estas ayudas recientemente publicadas están destinadas a viviendas unifamiliares aisladas o agrupadas en fila, así como para las ubicadas en edificios de tipología residencial colectiva. Se contemplan tres planos de mejoras: de seguridad y accesibilidad, de conservación y de eficiencia energética, estando cada uno limitado a los criterios correspondientes. 

Mejoras de seguridad y accesibilidad

Por una parte, el objeto de la convocatoria son las obras que faciliten la accesibilidad universal, así como la instalación de elementos o dispositivos electrónicos de comunicación entre las viviendas y el exterior, “tales como videoporteros que proporcionan información visual y auditiva y análogos”, para las viviendas unifamiliares aisladas o agrupadas en fila. 

En materia de movilidad se facilita la instalación de “ascensores, salvaescaleras, rampas, automatismos para la apertura de puertas incorporando mecanismos motorizados u otros dispositivos de accesibilidad”. Pero también aquellas mejoras con las que se mejore la autonomía y vida de las personas con movilidad reducida y con discapacidad sensorial o intelectual. 

Información y conservación

La ayuda también tiene una proyección para instalar elementos de información, de comunicación o de aviso “como señales luminosas y visuales, vibrotáctiles, o sonoras que permitan la orientación en el uso del interior de las viviendas”. Por otra parte, la instalación de tecnología en las viviendas también está amparada en la convocatoria para “favorecer la autonomía personal de personas mayores o con discapacidad”. 

Por su parte, en relación a la conservación, las ayudas contemplan las actuaciones de adecuación interior de la vivienda a las condiciones mínimas de funcionalidad, habitabilidad, seguridad e higiene legalmente exigidas, así como la adaptación a la normativa vigente de las instalaciones de electricidad. 

Mejoras energéticas

La eficiencia energética es otro de los grandes puntos en esta convocatoria de ayudas. Están enfocadas a las actuaciones en las viviendas de mejora de la envolvente térmica de la vivienda para reducir su demanda energética de calefacción o refrigeración, la sustitución de equipos de producción de calor o frío, la instalación de sistemas de control, regulación y gestión energética; el aislamiento térmico de las instalaciones de distribución y transporte o la sustitución de los equipos de movimiento de los fluidos caloportadores; la instalación de dispositivos de recuperación de energías residuales; la implantación de sistemas de enfriamiento gratuito por aire exterior y de recuperación de calor del aire de renovación y la conexión de viviendas a redes de calor y frío existente, entre otros. 

También se contemplan las actuaciones de instalación de equipos de generación o que permitan la utilización de energías renovables como la energía solar fotovoltaica, biomasa o geotermia que reduzcan el consumo de energía convencional térmica o eléctrica de la vivienda. 

Por último, también se tiene en cuenta las obras para la mejora del cumplimiento de los parámetros de protección contra el ruido, así como reducir los parámetros “de radón a niveles inferiores a 300 Bq/m3, o en las que sin alcanzar dicho nivel, se reduzca la concentración inicial en al menos un 50%”, tal y como refleja la convocatoria. 

Subvenciones

Para el desarrollo de estas actuaciones se destinarán 300.000 euros. Las personas beneficiarias podrán beneficiarse del 50% del coste subvencionable de la actuación, según indica el documento, con un importe máximo de 6.000 euros.

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